El presidente de la República, Rafael Correa, se declaró hoy satisfecho por los operativos desplegados por entidades estatales y de socorro para afrontar los efectos de la erupción del volcán Tungurahua, que ayer emanó una columna de vapor y ceniza de unos 10 kilómetros.
En su informe semanal de labores, Correa dijo que por la erupción se debió evacuar a poblaciones y cifró en 2.500 personas las desplazadas como consecuencia de la actividad volcánica.
"La buena noticia, es que los planes de emergencia han marchado muy bien, yo diría a la perfección", pese a lo "duro" de la emergencia "la buena noticia es que cada vez trabajamos de mejor manera", comento.
Durante el informe, Paúl Sánchez, de la Sala Situacional del Tungurahua, explicó que el volcán mantiene "sismos tremóricos y ha presentado flujos piroclásticos".
Según Sánchez, "hay 3.000 hectáreas, más o menos, afectadas por el volcán", que emanó ceniza que llegó también a otras provincias, entre ellas la costera del Guayas, situada en el suroeste del país.
De su lado, la agencia pública Andes, indicó que el Presidente de la Asamblea Nacional Legislativa, Fernando Cordero, dispuso la creación de comisiones especiales para que inspeccionen "in situ" los efectos provocados por la actividad eruptiva del volcán.
Tales comisiones, conformadas por los asambleístas de las provincias de Tungurahua, Bolívar y Chimborazo, analizarán, en sus correspondientes jurisdicciones, los daños causados por la emisión de ceniza y flujos piroclásticos.
Los asambleístas deberán presentar un informe a Cordero hasta el próximo martes.
Según el Instituto Geofísico, el volcán Tungurahua, situado en la zona andina de Ecuador, mantiene una actividad "moderada", con una serie de explosiones estrombolianas caracterizadas por la emisión de material incandescente y columnas de vapor con poca cantidad de ceniza.
De acuerdo al Instituto, la actividad del volcán es "moderada" y no representa "mayor peligro para la población".
El Tungurahua, de 5.016 metros de altitud y situado a 135 kilómetros al sur de Quito, inició su actual proceso eruptivo en 1999 y, desde entonces, ha intercalado periodos de gran actividad con lapsos de relativa calma.
Correa reiteró hoy que Ecuador es un país "tremendamente vulnerable al riesgo. No habrá preparación que sirva si en un momento el Tungurahua explota con toda su fuerza, o si, Dios no quiera, hay algún sismo, etcétera, pero al menos, estamos mucho mejor preparados que antes", opinó.
En su informe semanal de labores, Correa dijo que por la erupción se debió evacuar a poblaciones y cifró en 2.500 personas las desplazadas como consecuencia de la actividad volcánica.
"La buena noticia, es que los planes de emergencia han marchado muy bien, yo diría a la perfección", pese a lo "duro" de la emergencia "la buena noticia es que cada vez trabajamos de mejor manera", comento.
Durante el informe, Paúl Sánchez, de la Sala Situacional del Tungurahua, explicó que el volcán mantiene "sismos tremóricos y ha presentado flujos piroclásticos".
Según Sánchez, "hay 3.000 hectáreas, más o menos, afectadas por el volcán", que emanó ceniza que llegó también a otras provincias, entre ellas la costera del Guayas, situada en el suroeste del país.
De su lado, la agencia pública Andes, indicó que el Presidente de la Asamblea Nacional Legislativa, Fernando Cordero, dispuso la creación de comisiones especiales para que inspeccionen "in situ" los efectos provocados por la actividad eruptiva del volcán.
Tales comisiones, conformadas por los asambleístas de las provincias de Tungurahua, Bolívar y Chimborazo, analizarán, en sus correspondientes jurisdicciones, los daños causados por la emisión de ceniza y flujos piroclásticos.
Los asambleístas deberán presentar un informe a Cordero hasta el próximo martes.
Según el Instituto Geofísico, el volcán Tungurahua, situado en la zona andina de Ecuador, mantiene una actividad "moderada", con una serie de explosiones estrombolianas caracterizadas por la emisión de material incandescente y columnas de vapor con poca cantidad de ceniza.
De acuerdo al Instituto, la actividad del volcán es "moderada" y no representa "mayor peligro para la población".
El Tungurahua, de 5.016 metros de altitud y situado a 135 kilómetros al sur de Quito, inició su actual proceso eruptivo en 1999 y, desde entonces, ha intercalado periodos de gran actividad con lapsos de relativa calma.
Correa reiteró hoy que Ecuador es un país "tremendamente vulnerable al riesgo. No habrá preparación que sirva si en un momento el Tungurahua explota con toda su fuerza, o si, Dios no quiera, hay algún sismo, etcétera, pero al menos, estamos mucho mejor preparados que antes", opinó.