El fiscal general, Washington Pesántez, señaló ayer que, tras la decisión de la Justicia de ratificar la acusación de peculado y llamar a un juicio plenario a los ex banqueros William y Roberto Isaías, que actualmente residen en Estados Unidos, "corresponde exigir" su extradición.
"Para que se sustancie el plenario creemos que corresponde exigir a Estados Unidos la extradición, porque la etapa del plenario debe sustanciarse con la presencia de los imputados", señaló Pesántez a medios locales.
Los hermanos Isaías tienen órdenes de prisión en su contra desde hace más de ocho años por los supuestos delitos financieros cometidos cuando administraron el Filanbanco, uno de los treinta bancos que pasaron a manos del Estado entre 1998 y 1999, cuando se desató la peor crisis financiera de la historia ecuatoriana.
El saneamiento de esa crisis le ha costado al erario nacional más de 8.000 millones de dólares y, en su momento, perjuicios a miles de clientes, cuyas secuelas aún afectan al país.
"Voy a insistir en que el Departamento de Estado (de EE.UU.), en virtud del tratado que tenemos, en virtud del principio universal de reciprocidad, atienda el pedido de extradición de Ecuador para que se termine de sustanciar la causa", señaló Pesántez.
Además, el fiscal se felicitó de que "los conjueces ocasionales tuvieron la entereza de ratificar el pronunciamiento" de la acusación de peculado, "que les llama (a los hermanos Isaías) para juzgarles ya en la etapa última del proceso que se llama proceso plenario".
De ese modo, Pesántez se refirió a la decisión de tres conjueces ocasionales que desecharon esta semana una providencia anterior en la que se había cambiado el delito de peculado o malversación de fondos por la de falsificación de balances, que se trata de un delito menor.
A propósito, uno de los conjueces ocasionales del caso, Gerardo Morales, explicó a los periodistas que, en la anterior providencia, por la que se destituyeron a los conjueces originales, se encontró "una falencia de procedimiento que conllevaba una falta de competencia".
Ahora el caso "se pasará a la sala pertinente para que continúe con el trámite del juicio plenario", agregó Morales.
"Para que se sustancie el plenario creemos que corresponde exigir a Estados Unidos la extradición, porque la etapa del plenario debe sustanciarse con la presencia de los imputados", señaló Pesántez a medios locales.
Los hermanos Isaías tienen órdenes de prisión en su contra desde hace más de ocho años por los supuestos delitos financieros cometidos cuando administraron el Filanbanco, uno de los treinta bancos que pasaron a manos del Estado entre 1998 y 1999, cuando se desató la peor crisis financiera de la historia ecuatoriana.
El saneamiento de esa crisis le ha costado al erario nacional más de 8.000 millones de dólares y, en su momento, perjuicios a miles de clientes, cuyas secuelas aún afectan al país.
"Voy a insistir en que el Departamento de Estado (de EE.UU.), en virtud del tratado que tenemos, en virtud del principio universal de reciprocidad, atienda el pedido de extradición de Ecuador para que se termine de sustanciar la causa", señaló Pesántez.
Además, el fiscal se felicitó de que "los conjueces ocasionales tuvieron la entereza de ratificar el pronunciamiento" de la acusación de peculado, "que les llama (a los hermanos Isaías) para juzgarles ya en la etapa última del proceso que se llama proceso plenario".
De ese modo, Pesántez se refirió a la decisión de tres conjueces ocasionales que desecharon esta semana una providencia anterior en la que se había cambiado el delito de peculado o malversación de fondos por la de falsificación de balances, que se trata de un delito menor.
A propósito, uno de los conjueces ocasionales del caso, Gerardo Morales, explicó a los periodistas que, en la anterior providencia, por la que se destituyeron a los conjueces originales, se encontró "una falencia de procedimiento que conllevaba una falta de competencia".
Ahora el caso "se pasará a la sala pertinente para que continúe con el trámite del juicio plenario", agregó Morales.