El año pasado el sector bananero sufrió un bajón en sus importaciones. La Unión Europea dejó de importar de Ecuador 7,60% del producto.
El uso de contenedores frigoríficos de avanzada tecnología de la compañía Maersk, abrió a finales del mes pasado el mercado bananero para que exportadores de Filipinas vendan la fruta a la Unión Europea. Aquello pone en alerta a Ecuador, principal proveedor de ese mercado, ya que compra el 40% de la producción.
Bajo el nombre de “StarCare”, el container permite que oferentes de países lejanos puedan transportar, en viajes de más de 30 días, productos frescos a todo el mundo.
Pese a que el cargamento fue un envío de prueba con bananos que estuvieron 34 días en el trayecto de Davao (Filipinas) a Países Bajos, empresarios locales coinciden que es un riesgo para el sector donde se levantan del bajón que tuvieron en 2009. La UE bajó sus compras un 7,60% el año pasado.
Dolores Ramón, productora del Centro Agrícola de Machala, aseguró que la incursión de un nuevo país en un mercado “saturado” alerta a cualquiera, por lo que la afección sería inminente, no solo para los productores, sino también para el Gobierno que vería una reducción en sus divisas.
“El 2009 fue difícil. No se respetaron los precios de la caja, no teníamos a quien vender; y no hubo tanta oferta como se esperaba... la caja se vendía a 1 ó 2 dólares”, recordó Dolores.
Freddy Serrano, exportador de la compañía ENMA, fue más allá y prefirió tomar la incursión de Filipinas en el mercado europeo como preocupante desde cierto punto de vista.
“Sí, podría quitar espacio; sin embargo, Ecuador tiene más puntos positivos que destacar, ya que está más cerca que Filipinas de la Unión Europea, considerado el mejor mercado del mundo, sin contar que están entrando a comercializar la fruta bajo un sistema que les será caro y les restará competitividad”, sentenció Serrano.
El exportador local invierte alrededor de $ 4.500 en enviar un contenedor de banano a Europa, mientras que a los filipinos la misma carga les significaría casi $ 6.200, debido a la tecnología del depósito y a los tiempos que demora en llegar a puerto. De Filipinas a la Unión Europea son casi 32 días, mientras que una carga desde Ecuador a Hamburgo son 15 días.
“Que es preocupante, lo es. Que van a ir al mercado norteamericano, también es malo; que tienen niveles de salario y costos de producción más bajos que nosotros, por el tipo de moneda que tienen, también, por ello hay que alertar sobre lo que está pasando y unir al sector productor y a las autoridades para conseguir la rebaja de los costos del transporte, esa es una clave”, acotó Serrano.
Como medida de compensación, pequeños y medianos exportadores de 5 provincias del país iniciarán la primera semana de junio a exportar a Libia, donde usualmente Ecuador vendía 70.000 cajas semanales. La meta es que en tres meses lleguen 250.000 cajas.
El uso de contenedores frigoríficos de avanzada tecnología de la compañía Maersk, abrió a finales del mes pasado el mercado bananero para que exportadores de Filipinas vendan la fruta a la Unión Europea. Aquello pone en alerta a Ecuador, principal proveedor de ese mercado, ya que compra el 40% de la producción.
Bajo el nombre de “StarCare”, el container permite que oferentes de países lejanos puedan transportar, en viajes de más de 30 días, productos frescos a todo el mundo.
Pese a que el cargamento fue un envío de prueba con bananos que estuvieron 34 días en el trayecto de Davao (Filipinas) a Países Bajos, empresarios locales coinciden que es un riesgo para el sector donde se levantan del bajón que tuvieron en 2009. La UE bajó sus compras un 7,60% el año pasado.
Dolores Ramón, productora del Centro Agrícola de Machala, aseguró que la incursión de un nuevo país en un mercado “saturado” alerta a cualquiera, por lo que la afección sería inminente, no solo para los productores, sino también para el Gobierno que vería una reducción en sus divisas.
“El 2009 fue difícil. No se respetaron los precios de la caja, no teníamos a quien vender; y no hubo tanta oferta como se esperaba... la caja se vendía a 1 ó 2 dólares”, recordó Dolores.
Freddy Serrano, exportador de la compañía ENMA, fue más allá y prefirió tomar la incursión de Filipinas en el mercado europeo como preocupante desde cierto punto de vista.
“Sí, podría quitar espacio; sin embargo, Ecuador tiene más puntos positivos que destacar, ya que está más cerca que Filipinas de la Unión Europea, considerado el mejor mercado del mundo, sin contar que están entrando a comercializar la fruta bajo un sistema que les será caro y les restará competitividad”, sentenció Serrano.
El exportador local invierte alrededor de $ 4.500 en enviar un contenedor de banano a Europa, mientras que a los filipinos la misma carga les significaría casi $ 6.200, debido a la tecnología del depósito y a los tiempos que demora en llegar a puerto. De Filipinas a la Unión Europea son casi 32 días, mientras que una carga desde Ecuador a Hamburgo son 15 días.
“Que es preocupante, lo es. Que van a ir al mercado norteamericano, también es malo; que tienen niveles de salario y costos de producción más bajos que nosotros, por el tipo de moneda que tienen, también, por ello hay que alertar sobre lo que está pasando y unir al sector productor y a las autoridades para conseguir la rebaja de los costos del transporte, esa es una clave”, acotó Serrano.
Como medida de compensación, pequeños y medianos exportadores de 5 provincias del país iniciarán la primera semana de junio a exportar a Libia, donde usualmente Ecuador vendía 70.000 cajas semanales. La meta es que en tres meses lleguen 250.000 cajas.