La petrolera ecuatoriana Petroamazonas venderá el próximo 2 de junio su primera emisión de "bonos de carbono", por $25 millones, a la compañía sueca Tricorona.
La operación permitirá desarrollar un proyecto que busca reducir la emisión de dióxido de carbono (CO2) que se extrae en los campos de producción de crudo de la petrolera, en un sector de la Amazonía ecuatoriana.
El gas, que actualmente se quema en grandes mecheros, será utilizado para generar la electricidad que requiere Petroamazonas para su operación en el denominado "Bloque 15", en el centro-norte de la región amazónica del país.
El proyecto tiene un avance del 35% y se prevé que, con la operación financiera, se logren instalar los nuevos generadores eléctricos que utilicen el CO2.
La adjudicación de los bonos a Tricorona surgió luego de que Petroamazonas presentara su proyecto en mayo de 2009, en la Feria de Carbono de Barcelona.
La emisión de este tipo de papeles está amparada en la firma del protocolo de Kioto de 1997, por el cual los países industrializados se comprometieron a bajar la emisión de gases de efecto invernadero, a fin de atenuar el calentamiento global.
El proyecto no se ejecutó antes debido a la falta de tecnología y la inestabilidad en el volumen y composición química del gas, explicó el gerente de la iniciativa de Petroamazonas, Berend van den Berg.
Indicó que la provisión de energía en el "Bloque 15" se obtiene actualmente de plantas termoeléctricas que funcionan con base en la combustión de crudo.
Por ello, dijo que Petroamazonas ha decidido cambiar la tecnología de sus generadores para que funcionen con motores a gas y también con crudo, como mecanismo de soporte.
Van den Berg señaló que el proyecto tiene un costo total de $80 millones, pero dijo que éste implicará un ahorro anual de $75 millones, por la reducción en el consumo de crudo.
El cambio de tecnología también representará una disminución de las emisiones de CO2 por un millón de toneladas en los próximos diez años, añadió.
Apuntó que el proyecto y la reducción de la emisión de gas deben ser validados y registrados ante las Naciones Unidas, mediante estudios realizados por consultores especializados.
Petroamazonas espera que los bonos de carbono estén registrados a finales de este año, aunque Van den Berg explicó que se decidió hacer la venta anticipadamente para mayor seguridad, ya que el tratado de Kioto comprometió la emisión de esos papeles hasta el año 2012. (EFE)
La operación permitirá desarrollar un proyecto que busca reducir la emisión de dióxido de carbono (CO2) que se extrae en los campos de producción de crudo de la petrolera, en un sector de la Amazonía ecuatoriana.
El gas, que actualmente se quema en grandes mecheros, será utilizado para generar la electricidad que requiere Petroamazonas para su operación en el denominado "Bloque 15", en el centro-norte de la región amazónica del país.
El proyecto tiene un avance del 35% y se prevé que, con la operación financiera, se logren instalar los nuevos generadores eléctricos que utilicen el CO2.
La adjudicación de los bonos a Tricorona surgió luego de que Petroamazonas presentara su proyecto en mayo de 2009, en la Feria de Carbono de Barcelona.
La emisión de este tipo de papeles está amparada en la firma del protocolo de Kioto de 1997, por el cual los países industrializados se comprometieron a bajar la emisión de gases de efecto invernadero, a fin de atenuar el calentamiento global.
El proyecto no se ejecutó antes debido a la falta de tecnología y la inestabilidad en el volumen y composición química del gas, explicó el gerente de la iniciativa de Petroamazonas, Berend van den Berg.
Indicó que la provisión de energía en el "Bloque 15" se obtiene actualmente de plantas termoeléctricas que funcionan con base en la combustión de crudo.
Por ello, dijo que Petroamazonas ha decidido cambiar la tecnología de sus generadores para que funcionen con motores a gas y también con crudo, como mecanismo de soporte.
Van den Berg señaló que el proyecto tiene un costo total de $80 millones, pero dijo que éste implicará un ahorro anual de $75 millones, por la reducción en el consumo de crudo.
El cambio de tecnología también representará una disminución de las emisiones de CO2 por un millón de toneladas en los próximos diez años, añadió.
Apuntó que el proyecto y la reducción de la emisión de gas deben ser validados y registrados ante las Naciones Unidas, mediante estudios realizados por consultores especializados.
Petroamazonas espera que los bonos de carbono estén registrados a finales de este año, aunque Van den Berg explicó que se decidió hacer la venta anticipadamente para mayor seguridad, ya que el tratado de Kioto comprometió la emisión de esos papeles hasta el año 2012. (EFE)
