Quito, EFE · El legislador ecuatoriano Andrés Páez, del partido Izquierda Democrática (ID), sugirió ayer al presidente de la Asamblea Nacional (Parlamento), el oficialista Fernando Cordero, que dimita de su cargo, por supuesto abuso en el ejercicio de sus funciones.
"Cordero no es el gerente propietario de la Asamblea", indicó Páez en un comunicado remitido ayer, en el que critica al jefe del Legislativo por haber confrontado una manifestación de la oposición efectuada la semana pasada en Guayaquil.
Páez se refirió así a la advertencia que hizo Cordero, del movimiento oficialista Alianza PAIS, a la ministra de Finanzas, María Elsa Viteri, de llevarla a una interpelación en el Parlamento, si accedía al aumento de rentas que exige el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot.
El presidente del Legislativo es "un simple mandatario, que debe someterse a las órdenes de su mandante, que es el cuerpo colegiado", el Parlamento, señaló Páez al acusar a Cordero de hacer "amenazas pendencieras" y, supuestamente, abusar del poder.
Para Páez, las expresiones de Cordero demuestran "su total sumisión" al poder Ejecutivo y recordó que el ahora jefe del Parlamento también reclamó rentas al Gobierno en el pasado, cuando fue alcalde de la ciudad andina de Cuenca.
"Cordero se olvida de cuando fue alcalde de Cuenca y reclamó, como tienen derecho todos los cantones de la República, por las rentas que legítimamente les corresponden", señaló Páez.
"Es lamentable la actitud de Cordero, que está totalmente sometido a las órdenes del Palacio de Gobierno" y "es más lamentable que haga un uso indebido de su posición de presidente del Parlamento para utilizar a toda la institución en sus particulares propósitos", agregó el legislador.
El jefe del Parlamento "ha perdido toda autoridad moral al usar, a su gana y gusto, al Parlamento", agregó Páez, aunque no precisó si su llamado para que Cordero dimita supone otras acciones legislativas para lograrlo.
La marcha
La movilización de protesta organizada el pasado jueves en Guayaquil sirvió de vitrina para que la oposición, liderada por Nebot, amenazara con recurrir a la desobediencia civil y a la resistencia, si el Ejecutivo afectaba ciertas competencias de ese municipio.
El Gobierno ha calificado de "importante" la manifestación opositora y ha hecho un llamamiento a esa tendencia para abrir un espacio de diálogo, aunque ha ratificado que no accederá al aumento de rentas, como exige Nebot.
"Cordero no es el gerente propietario de la Asamblea", indicó Páez en un comunicado remitido ayer, en el que critica al jefe del Legislativo por haber confrontado una manifestación de la oposición efectuada la semana pasada en Guayaquil.
Páez se refirió así a la advertencia que hizo Cordero, del movimiento oficialista Alianza PAIS, a la ministra de Finanzas, María Elsa Viteri, de llevarla a una interpelación en el Parlamento, si accedía al aumento de rentas que exige el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot.
El presidente del Legislativo es "un simple mandatario, que debe someterse a las órdenes de su mandante, que es el cuerpo colegiado", el Parlamento, señaló Páez al acusar a Cordero de hacer "amenazas pendencieras" y, supuestamente, abusar del poder.
Para Páez, las expresiones de Cordero demuestran "su total sumisión" al poder Ejecutivo y recordó que el ahora jefe del Parlamento también reclamó rentas al Gobierno en el pasado, cuando fue alcalde de la ciudad andina de Cuenca.
"Cordero se olvida de cuando fue alcalde de Cuenca y reclamó, como tienen derecho todos los cantones de la República, por las rentas que legítimamente les corresponden", señaló Páez.
"Es lamentable la actitud de Cordero, que está totalmente sometido a las órdenes del Palacio de Gobierno" y "es más lamentable que haga un uso indebido de su posición de presidente del Parlamento para utilizar a toda la institución en sus particulares propósitos", agregó el legislador.
El jefe del Parlamento "ha perdido toda autoridad moral al usar, a su gana y gusto, al Parlamento", agregó Páez, aunque no precisó si su llamado para que Cordero dimita supone otras acciones legislativas para lograrlo.
La marcha
La movilización de protesta organizada el pasado jueves en Guayaquil sirvió de vitrina para que la oposición, liderada por Nebot, amenazara con recurrir a la desobediencia civil y a la resistencia, si el Ejecutivo afectaba ciertas competencias de ese municipio.
El Gobierno ha calificado de "importante" la manifestación opositora y ha hecho un llamamiento a esa tendencia para abrir un espacio de diálogo, aunque ha ratificado que no accederá al aumento de rentas, como exige Nebot.
