Parecía que con la venta de urea subsidiada e implementos para el agro el Gobierno tendría contento al sector. Pero la carga tributaria, falta de apertura para exportar arroz, los bajos precios de la leche y las nuevas normas para los bananeros y camaroneros abrieron nuevos frentes.
Los ganaderos anunciaron para el próximo 23 de marzo un plantón en los bajos de la Gobernación del Guayas para reclamar por la falta de atención a sus pedidos: revisar el precio de la leche en finca congelado hace dos años en 35,75 centavos por litro, reconsiderar los nuevos tributos del 1% a la retención de la fuente y disminuir la delincuencia rural.
La medida surgirá tras seis meses de espera a los ofrecimientos del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Acuacultura (Magap) por encontrar soluciones. “Pero de promesas no pasan”, dijo Paul Olsen, presidente de la Asociación de Ganaderos del Litoral.
Quienes dieron la pauta a los reclamos fueron los camaroneros. Los productores y exportadores se unieron para reclamar por el decreto 261, que limitaba la tenencia de tierras bajo concesión y en propiedad privada en hasta 50 hectáreas para persona natural y 250 para las empresas. Luego de reuniones y una manifestación obtuvieron el compromiso oficial: modificar el documento. Ayer fue firmada la transitoria modificatoria.
Los bananeros están listos para salir a las calles. Lo podría evitar una reunión con el Subsecretaria de Agricultura del Litoral, Rafael Guerrero, el próximo lunes. La cita fue solicitada.
El objetivo es plantear alternativas que faciliten el proceso de regularización. Si no se revén las medidas adoptadas algunos de ellos no podrán reinscribir sus fincas y tendrán prohibido vender su fruta. Sin atención a esos puntos es inminente una paralización.
Tras varios anuncios de la exportación de arroz y pocas concreciones, los campesinos tienen un panorama complicado: la cosecha de invierno sale el próximo mes sin que se restablezcan las compras de Colombia. El temor es que por los excedentes los precios caigan de los 28 dólares oficiales.
La única opción es exportar. Si no logran que el Gobierno elimine la restricción a la exportación, vigente hace dos años, los dirigentes llamarán a una movilización.
Los ganaderos anunciaron para el próximo 23 de marzo un plantón en los bajos de la Gobernación del Guayas para reclamar por la falta de atención a sus pedidos: revisar el precio de la leche en finca congelado hace dos años en 35,75 centavos por litro, reconsiderar los nuevos tributos del 1% a la retención de la fuente y disminuir la delincuencia rural.
La medida surgirá tras seis meses de espera a los ofrecimientos del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Acuacultura (Magap) por encontrar soluciones. “Pero de promesas no pasan”, dijo Paul Olsen, presidente de la Asociación de Ganaderos del Litoral.
Quienes dieron la pauta a los reclamos fueron los camaroneros. Los productores y exportadores se unieron para reclamar por el decreto 261, que limitaba la tenencia de tierras bajo concesión y en propiedad privada en hasta 50 hectáreas para persona natural y 250 para las empresas. Luego de reuniones y una manifestación obtuvieron el compromiso oficial: modificar el documento. Ayer fue firmada la transitoria modificatoria.
Los bananeros están listos para salir a las calles. Lo podría evitar una reunión con el Subsecretaria de Agricultura del Litoral, Rafael Guerrero, el próximo lunes. La cita fue solicitada.
El objetivo es plantear alternativas que faciliten el proceso de regularización. Si no se revén las medidas adoptadas algunos de ellos no podrán reinscribir sus fincas y tendrán prohibido vender su fruta. Sin atención a esos puntos es inminente una paralización.
Tras varios anuncios de la exportación de arroz y pocas concreciones, los campesinos tienen un panorama complicado: la cosecha de invierno sale el próximo mes sin que se restablezcan las compras de Colombia. El temor es que por los excedentes los precios caigan de los 28 dólares oficiales.
La única opción es exportar. Si no logran que el Gobierno elimine la restricción a la exportación, vigente hace dos años, los dirigentes llamarán a una movilización.