Washington.EFE. Barack Obama, junto al vicepresidente Dick Cheney, durante la alocución posterior a la votación sobre el proyecto de ley.
Los opositores republicanos en el Senado se preparaban ayer para hacerle la guerra al presidente Barack Obama en la revisión final de la histórica reforma de la salud aprobada el domingo y que el Mandatario promulgará hoy.
La minoría republicana en el Senado anunció que pretende hacer fracasar la aprobación de las modificaciones introducidas al proyecto por la Cámara de Representantes.
La Cámara con mayoría demócrata aprobó con 219 votos a favor y 212 en contra un proyecto de ley que extiende la cobertura de salud a 32 millones de estadounidenses más, convirtiéndose en el mayor cambio político en cuatro décadas.
Obama, quien celebró el voto como “la respuesta a los sueños de muchos”, emprenderá una campaña para explicar los beneficios de la reforma al público de EE.UU. entre el que la medida es muy impopular.
Críticos de la reforma sostienen que la iniciativa sería una fuerte intervención en el sector de salud que elevaría los costos, incrementaría el déficit de presupuesto y reduciría las opciones de los pacientes.
Una vez que Obama firme la legislación aprobada por el Congreso, el líder demócrata del Senado, Harry Reid, llevará ante el pleno de la Cámara alta el paquete de cambios.
Los republicanos pretende contestar la validez del procedimiento gracias al cual los demócratas quieren aprobar estas modificaciones -con una mayoría simple de 51 votos-.
La reforma se pondrá en marcha cuando Obama promulgue los cambios. Algunos se aplicarán de manera inmediata; otros puntos se demorarán, para dar tiempo a las empresas a adaptarse
Los opositores republicanos en el Senado se preparaban ayer para hacerle la guerra al presidente Barack Obama en la revisión final de la histórica reforma de la salud aprobada el domingo y que el Mandatario promulgará hoy.
La minoría republicana en el Senado anunció que pretende hacer fracasar la aprobación de las modificaciones introducidas al proyecto por la Cámara de Representantes.
La Cámara con mayoría demócrata aprobó con 219 votos a favor y 212 en contra un proyecto de ley que extiende la cobertura de salud a 32 millones de estadounidenses más, convirtiéndose en el mayor cambio político en cuatro décadas.
Obama, quien celebró el voto como “la respuesta a los sueños de muchos”, emprenderá una campaña para explicar los beneficios de la reforma al público de EE.UU. entre el que la medida es muy impopular.
Críticos de la reforma sostienen que la iniciativa sería una fuerte intervención en el sector de salud que elevaría los costos, incrementaría el déficit de presupuesto y reduciría las opciones de los pacientes.
Una vez que Obama firme la legislación aprobada por el Congreso, el líder demócrata del Senado, Harry Reid, llevará ante el pleno de la Cámara alta el paquete de cambios.
Los republicanos pretende contestar la validez del procedimiento gracias al cual los demócratas quieren aprobar estas modificaciones -con una mayoría simple de 51 votos-.
La reforma se pondrá en marcha cuando Obama promulgue los cambios. Algunos se aplicarán de manera inmediata; otros puntos se demorarán, para dar tiempo a las empresas a adaptarse