lunes, 29 de marzo de 2010

Periodista Emilio Palacio presenta recurso legal por sentencia


La defensa del periodista Emilio Palacio, sentenciado a tres años de prisión por injurias al presidente de la Corporación Financiera Nacional (CFN), Camilo Samán, presenta hoy una solicitud de ampliación y aclaración del fallo dictado por el Juzgado Segundo de Garantías Penales del Guayas.

El pedido lo hará Byron López, abogado de Palacio, ante la jueza temporal de ese despacho, Carmen Alicia Argüello, quien notificará la acción a la parte acusatoria y luego decidirá si concede o no la aclaración de su fallo. Si lo niega, entonces el periodista planteará la apelación de la sentencia ante la Corte Provincial de Justicia, que sería la segunda instancia.

Palacio, editor de Opinión de Diario EL UNIVERSO, fue demandado por Samán en octubre del 2009 por el artículo titulado ‘Camilo, el matón’, que el periodista escribió en agosto de ese año. La opinión de Palacio tuvo como antecedente una noticia de este Diario sobre el índice de morosidad de la CFN en los microcréditos.

En una entrevista con Teleamazonas, Palacio ratificó ayer que la acusación de Samán no tiene fundamento. “Hay personas que creen que matón quiere decir: el que mata, siempre lo he usado en el sentido correcto como consta en el diccionario, (como) el bravucón, el pendenciero. El que mata es matador o asesino, matón no es el que mata, sino es aquel bravucón, el bravito del barrio”.

Apeló a la reacción social de los ecuatorianos para exigir al presidente Rafael Correa que renuncie al cargo si no puede vivir en democracia, dijo: “Lo que les digo a los ecuatorianos es que salgan, porque si no, les van a sacar la madre, se viene un dictador (...), va a disolver la Asamblea mediante la muerte cruzada o por cualquier sistema y va a gobernar él solo (...). No llamo a tumbar a este Gobierno, llamo a decirle a este Presidente hasta aquí no más”.

El abogado de Samán, Gutemberg Vera, dijo que hoy, en rueda de prensa con este, anunciará si presentará una apelación al fallo, que “debió ser más drástico en algunas partes”.