Según Camilo Samán, presidente ejecutivo de la CFN, la deuda asciende a $3 millones, que parten de un préstamo inicial de $800 000 que el Banco del Progreso, hoy cerrado, concedió a la empresa Ecuaprimicias, a la que pertenece Radio Sucre.
Desde entonces, la empresa no pagó la deuda, por lo que en catorce años, los intereses se acumularon en $2,2 millones. Esta empresa planteó un juicio de excepción para evadir el pago.
La CFN es la encargada de cobrar las deudas a los morosos del cerrado Banco del Progreso. "Pero en ningún momento se pretende que radio Sucre deje de funcionar, simplemente estamos cobrando una deuda, lo que es nuestra obligación", reiteró Samán.
Radio Sucre pertenece a Vicente Arroba Ditto, quien fue concejal del municipio de Guayaquil hasta el año pasado, por el Partido Social Cristiano. Arroba no respondió ayer a sus teléfonos.
Los empleados de la emisora fueron desalojados y la programación de la radio fue suspendida. Guardias de seguridad de la CFN impedían el ingreso de cualquier persona. En la tarde únicamente se transmitió música.
Samán dijo que el embargo se dio contra el edificio de la radio y parte de los equipos de transmisión, como fórmula para recuperar parte de la deuda. Pero aclaró que la CFN está abierta a una renegociación, pero con el pago inicial mínimo de un 10% del total de lo vencido.