martes, 18 de agosto de 2009

Rodríguez: Unasur debatirá entre belicismo colombiano y pacifismo del resto

El dirigente del gobernante Partido Socialista Unificado de Venezuela (PSUV) Alí Rodríguez, también ministro de Finanzas, opinó hoy que la próxima cumbre de Unasur servirá para debatir entre la, a su juicio, "posición guerrerista" colombiana y el pacifismo mayoritario en la región.

"El problema planteado en este momento en América Latina es un conflicto entre dos posiciones: una posición guerrerista del gobierno colombiano y una que defiende la paz como la defiende el gobierno venezolano y la aplastante mayoría de nuestros pueblos y gobiernos", dijo Rodríguez.

"Esto es con toda seguridad lo que se debatirá en Unasur si el presidente colombiano Álvaro. Uribe cumple con su compromiso de asistir", añadió.

Rodríguez habló como miembro de la dirección del PSUV en una conferencia de prensa en Caracas centrada en el reciente acuerdo para que Estados Unidos pueda usar bases en Colombia.

"A lo largo de décadas Colombia ha librado una guerra que no puede ganar si no busca fórmulas de acuerdos y de soluciones pacíficas", señaló hoy Rodríguez, quien además se mostró convencido de que este país "busca extender la guerra fuera de sus fronteras".

La mayoría de los gobiernos latinoamericanos "muestra una posición pacífica", frente a esta "amenaza real de guerra", dijo Rodríguez en referencia al uso por Estados Unidos de siete bases en Colombia, en virtud de un acuerdo bilateral cerrado este viernes.

La Unión Suramericana de Naciones (Unasur) convocó para el próximo 28 de agosto una reunión extraordinaria en la ciudad argentina de Bariloche, para tratar las implicaciones de los nuevos convenios militares entre Colombia y Estados Unidos, que el Gobierno de Hugo Chávez considera una "amenaza" para Venezuela.

A juicio de Rodríguez, Uribe "es prisionero de algo que le impide actuar con independencia", ya que el acuerdo suscrito con Estados Unidos "afecta no solo a su nación sino a sus naciones hermanas".

Así, mostró su preocupación por la amenaza a la soberanía de los países vecinos que conlleva el acuerdo, "sobre todo" para Ecuador, que "ya fue objeto de una intervención militar por parte del gobierno colombiano", y para Venezuela.

En este sentido, remarcó que las bases colombianas se sumarían a las establecidas en el Caribe, que "rodean literalmente Venezuela con el objetivo final de buscar el empeoramiento de la situación por medio de la amenaza militar y la acción militar". "Queremos la paz, no la guerra, pero si somos obligados por alguna acción de agresión deberemos, desgraciadamente porque no hay mayor desgracia para un pueblo que ir al ejercicio de la violencia, defender nuestra soberanía y dignidad", reveló Rodríguez.