La política económica que aplicará el Gobierno durante los próximos cuatro años de gestión apunta a modificar la estructura productiva del país con el fin de mejorar la producción, crear nuevas fuentes de empleo y dinamizar la economía, dijo el ministro Coordinador de la Política Económica, Diego Borja.
“El Ecuador ha visto que ante un problema de la economía mundial inmediatamente se cierran los mercados para sus productos tradicionales y no tradicionales. Entonces, qué necesita el país: cambiar su base productiva”, agregó.
El secretario de Estado aseguró que “bajo ningún punto de vista se permitirá que los efectos de la crisis lo paguen los más pobres del país”. Y, en este sentido, indicó que uno de los ejes de la política del Gobierno es tener un control más adecuado del sistema financiero nacional.
“No puede ser que en un momento de crisis los grandes bancos privados saquen el dinero de la economía ecuatoriana mientras que las cooperativas, que son organismos financieros que reciben el dinero de los más pobres inyecten dinero a la economía .Esos contrasentidos no pueden mantenerse”, afirmó.
El ministro resaltó el papel de la banca pública en la colocación de crédito productivo. “Ha sido un puntal para que no se caída la economía”, sostuvo. De ahí que el Gobierno está empeñado en mejorar su desempeño y entregarle más responsabilidades.
“La Corporación Financiera Nacional (CFN), el Banco Nacional de Fomento (BNF) y el Banco del Estado (Bede) están haciendo lo que siempre debieron hacer. Antes la venían arrinconando a fin de desaparecerla o privatizarla, ahora se ha convertido en una banca de desarrollo y de reactivación de la producción”, indicó, por su parte, el director del Servicio de Rentas Internas (SRI), Carlos Marx Carrasco.
Justamente por ello, una de las medida plateadas por el Régimen permite que el Banco Central del Ecuador y los ministerios de Coordinación de la Política Económica y de la Producción, como administradores de la Reserva Internacional de Libre Disponibilidad (RILD) , inviertan $1 600 en la banca pública para que, a su vez, esta coloque créditos para el sector productivo.
Con este propósito, el BCE ya autorizó al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) a invertir $300 millones en la CFN. Estos recursos corresponden a los depósitos que tiene la entidad en la RILD.
El ministro coordinador de la Política Económica, explicó que la idea es que los fondos del ahorro interno que actualmente están depositados en el exterior “no sirvan para financiar el desarrollo de países extranjeros sino que se queden en el país para financiar el desarrollo interno”.
Los recursos serán invertidos en proyectos de segura rentabilidad y desarrollo como vivienda, infraestructura, hidroeléctricas, etc.
“El Ecuador ha visto que ante un problema de la economía mundial inmediatamente se cierran los mercados para sus productos tradicionales y no tradicionales. Entonces, qué necesita el país: cambiar su base productiva”, agregó.
El secretario de Estado aseguró que “bajo ningún punto de vista se permitirá que los efectos de la crisis lo paguen los más pobres del país”. Y, en este sentido, indicó que uno de los ejes de la política del Gobierno es tener un control más adecuado del sistema financiero nacional.
“No puede ser que en un momento de crisis los grandes bancos privados saquen el dinero de la economía ecuatoriana mientras que las cooperativas, que son organismos financieros que reciben el dinero de los más pobres inyecten dinero a la economía .Esos contrasentidos no pueden mantenerse”, afirmó.
El ministro resaltó el papel de la banca pública en la colocación de crédito productivo. “Ha sido un puntal para que no se caída la economía”, sostuvo. De ahí que el Gobierno está empeñado en mejorar su desempeño y entregarle más responsabilidades.
“La Corporación Financiera Nacional (CFN), el Banco Nacional de Fomento (BNF) y el Banco del Estado (Bede) están haciendo lo que siempre debieron hacer. Antes la venían arrinconando a fin de desaparecerla o privatizarla, ahora se ha convertido en una banca de desarrollo y de reactivación de la producción”, indicó, por su parte, el director del Servicio de Rentas Internas (SRI), Carlos Marx Carrasco.
Justamente por ello, una de las medida plateadas por el Régimen permite que el Banco Central del Ecuador y los ministerios de Coordinación de la Política Económica y de la Producción, como administradores de la Reserva Internacional de Libre Disponibilidad (RILD) , inviertan $1 600 en la banca pública para que, a su vez, esta coloque créditos para el sector productivo.
Con este propósito, el BCE ya autorizó al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) a invertir $300 millones en la CFN. Estos recursos corresponden a los depósitos que tiene la entidad en la RILD.
El ministro coordinador de la Política Económica, explicó que la idea es que los fondos del ahorro interno que actualmente están depositados en el exterior “no sirvan para financiar el desarrollo de países extranjeros sino que se queden en el país para financiar el desarrollo interno”.
Los recursos serán invertidos en proyectos de segura rentabilidad y desarrollo como vivienda, infraestructura, hidroeléctricas, etc.