El Gobierno de Ecuador anunció hoy que cambiará para finales de 2010 todos los convenios que mantiene con las compañías que extraen crudo en el país, para convertirlos a la modalidad de contratos de servicios.
Con esa modificación, Ecuador prevé recuperar la soberanía sobre la explotación de crudo, que hasta ahora se rige, en su mayoría, por contratos de participación en la renta que deja la extracción del hidrocarburo, afirmó el ministro de Minas y Peróleos, Germánico Pinto.
La autoridad petrolera, en un diálogo con periodistas, indicó que la migración en la modalidad de los contratos se efectuará en dos fases: una de presentación de los modelos de convenio y una segunda para la suscripción de los mismos.
"En una primera etapa se presentará el modelo de contrato y se recibirán las observaciones (de las compañías), eso pudiera tomar el mes de septiembre (próximo).
La segunda etapa es la negociación de los contratos, y nos daremos todo el 2010" para hacerlo, sostuvo Pinto.
Los nuevos contratos se firmarán con todas las empresas que mantienen hasta ahora convenios de participación, en la que existe un reparto de utilidades entre las compañías y el Estado, puntualizó.
No obstante, varias de esas compañías han pedido una modificación transitoria de esos convenios, por el plazo de un año, como una transición en el proceso de migración hacia los contratos de servicios, explicó.
El ministro añadió que en esta semana terminará de elaborar la propuesta de nuevo contrato que se presentará a las petroleras privadas y que durante unas dos semanas más se realizarán ajustes al modelo.
Señaló que en el caso de la italiana Agip, que mantiene actualmente un contrato de prestación de servicios, también tendrá que cambiar ese contrato, para ajustarse a las normas que establezca el nuevo modelo de convenio.
Mientras tanto, esta empresa deberá firmar un alcance transitorio a su actual convenio, que podría concretarse la próxima semana, a la espera de un informe del Servicio de Rentas Internas (SRI), que es la agencia de recaudación tributaria del Estado.
El cambio de la modalidad de los contratos petroleros fue anunciado por el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, en 2007, luego de que se aplicase en el país una modificación en los convenios de participación.
En 2006, Ecuador aplicó una norma para que el reparto de las utilidades extraordinarias obtenidas por las compañías privadas, ante el elevado precio del crudo en los mercados internacionales, fuese a partes iguales, es decir la mitad para la empresa y el resto para el Estado.
Un año después esa norma se aplicó bajo un reparto del 99 por ciento para el Estado y el 1 por ciento para las petroleras, lo que generó problemas con varias firmas que, incluso, demandaron a Ecuador ante organismos internacionales.
Con la modificación de los convenios, el Estado pagará a las compañías por sus servicios y asumirá el control de la renta petrolera.
El petróleo es la principal fuente de ingresos de Ecuador, ya que las exportaciones de crudo financian casi el 35 por ciento del presupuesto del Estado.
Ecuador, que es el quinto productor de crudo en América, extrae unos 490.000 barriles diarios de crudo, el 60 por ciento de los cuales pertenece al Estado y el resto se lo reparten una decena de compañías privadas que operan en la Amazonía ecuatoriana.
Con esa modificación, Ecuador prevé recuperar la soberanía sobre la explotación de crudo, que hasta ahora se rige, en su mayoría, por contratos de participación en la renta que deja la extracción del hidrocarburo, afirmó el ministro de Minas y Peróleos, Germánico Pinto.
La autoridad petrolera, en un diálogo con periodistas, indicó que la migración en la modalidad de los contratos se efectuará en dos fases: una de presentación de los modelos de convenio y una segunda para la suscripción de los mismos.
"En una primera etapa se presentará el modelo de contrato y se recibirán las observaciones (de las compañías), eso pudiera tomar el mes de septiembre (próximo).
La segunda etapa es la negociación de los contratos, y nos daremos todo el 2010" para hacerlo, sostuvo Pinto.
Los nuevos contratos se firmarán con todas las empresas que mantienen hasta ahora convenios de participación, en la que existe un reparto de utilidades entre las compañías y el Estado, puntualizó.
No obstante, varias de esas compañías han pedido una modificación transitoria de esos convenios, por el plazo de un año, como una transición en el proceso de migración hacia los contratos de servicios, explicó.
El ministro añadió que en esta semana terminará de elaborar la propuesta de nuevo contrato que se presentará a las petroleras privadas y que durante unas dos semanas más se realizarán ajustes al modelo.
Señaló que en el caso de la italiana Agip, que mantiene actualmente un contrato de prestación de servicios, también tendrá que cambiar ese contrato, para ajustarse a las normas que establezca el nuevo modelo de convenio.
Mientras tanto, esta empresa deberá firmar un alcance transitorio a su actual convenio, que podría concretarse la próxima semana, a la espera de un informe del Servicio de Rentas Internas (SRI), que es la agencia de recaudación tributaria del Estado.
El cambio de la modalidad de los contratos petroleros fue anunciado por el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, en 2007, luego de que se aplicase en el país una modificación en los convenios de participación.
En 2006, Ecuador aplicó una norma para que el reparto de las utilidades extraordinarias obtenidas por las compañías privadas, ante el elevado precio del crudo en los mercados internacionales, fuese a partes iguales, es decir la mitad para la empresa y el resto para el Estado.
Un año después esa norma se aplicó bajo un reparto del 99 por ciento para el Estado y el 1 por ciento para las petroleras, lo que generó problemas con varias firmas que, incluso, demandaron a Ecuador ante organismos internacionales.
Con la modificación de los convenios, el Estado pagará a las compañías por sus servicios y asumirá el control de la renta petrolera.
El petróleo es la principal fuente de ingresos de Ecuador, ya que las exportaciones de crudo financian casi el 35 por ciento del presupuesto del Estado.
Ecuador, que es el quinto productor de crudo en América, extrae unos 490.000 barriles diarios de crudo, el 60 por ciento de los cuales pertenece al Estado y el resto se lo reparten una decena de compañías privadas que operan en la Amazonía ecuatoriana.