Ecuador anunció el martes que extendió por un año el acuerdo provisional con la china Andes Petroleum para que explote unos 60.000 barriles por día (b/d) dentro de la transición para la firma de nuevos contratos con todas las compañías, previsto para 2010.
"El Comité Especial de Licitaciones (CEL) acogió un pedido de la compañía Petroriental (Andes Petroleum), operadora de los bloques 17 y 14 (en la selva de la Amazonia), y resolvió ampliar hasta por un año más la vigencia de los contratos modificatorios de participación", señaló el ministerio de Petróleos.
Ecuador mantiene desde 2008 convenios provisionales con tres empresas, incluida la hispano-argentina Repsol-YPF, como antesala para cambiar los actuales contratos de participación, que dejan buena parte del crudo a las firmas.
Bajo la nueva modalidad de prestación de servicios, el Estado reconocerá los gastos de operación y un margen de utilidad para controlar toda la producción.
Las petroleras que operan en el país lo harán bajo la modalidad de prestación de servicios, con la cual el Estado recupera la soberanía sobre el manejo de los hidrocarburos, según el ministerio.
El titular de Petróleos, Germánico Pinto, dijo que el contrato provisional con Andes Petroleum -la primera en acogerse a la prórroga- estará vigente hasta cuando concluyan las negociaciones para aplicar el sistema de prestación de servicios, anotando que el proceso no pasará de 360 días más.
Señaló que en el caso de las otras compañías que también tienen firmados acuerdos temporales, como la brasileña Petrobras, se operará de la misma manera. "Es decir que se aplicará la cláusula se extensión del contrato, de hasta un año, si el caso lo amerita", anotó.
El gobierno presentará su proyecto de nuevo contrato hacia mediados de setiembre próximo para la suscripción hasta finales de 2010.
La petrolera franco-británica Perenco se negó a renegociar los contratos y mantiene una deuda por 327 millones de dólares, derivada de una polémica repartición de ganancias, por lo que Quito está confiscando su producción, de unos 21.000 b/d.
Esa empresa fue acusada hace un mes de abandonar los campos, los cuales están siendo operados por una firma de la estatal Petroecuador.
En el primer semestre de 2009, el país sudamericano -el miembro más pequeño de la OPEP- extrajo unos 495.000 b/d, de los cuales un 43% correspondió a las empresas extranjeras.
"El Comité Especial de Licitaciones (CEL) acogió un pedido de la compañía Petroriental (Andes Petroleum), operadora de los bloques 17 y 14 (en la selva de la Amazonia), y resolvió ampliar hasta por un año más la vigencia de los contratos modificatorios de participación", señaló el ministerio de Petróleos.
Ecuador mantiene desde 2008 convenios provisionales con tres empresas, incluida la hispano-argentina Repsol-YPF, como antesala para cambiar los actuales contratos de participación, que dejan buena parte del crudo a las firmas.
Bajo la nueva modalidad de prestación de servicios, el Estado reconocerá los gastos de operación y un margen de utilidad para controlar toda la producción.
Las petroleras que operan en el país lo harán bajo la modalidad de prestación de servicios, con la cual el Estado recupera la soberanía sobre el manejo de los hidrocarburos, según el ministerio.
El titular de Petróleos, Germánico Pinto, dijo que el contrato provisional con Andes Petroleum -la primera en acogerse a la prórroga- estará vigente hasta cuando concluyan las negociaciones para aplicar el sistema de prestación de servicios, anotando que el proceso no pasará de 360 días más.
Señaló que en el caso de las otras compañías que también tienen firmados acuerdos temporales, como la brasileña Petrobras, se operará de la misma manera. "Es decir que se aplicará la cláusula se extensión del contrato, de hasta un año, si el caso lo amerita", anotó.
El gobierno presentará su proyecto de nuevo contrato hacia mediados de setiembre próximo para la suscripción hasta finales de 2010.
La petrolera franco-británica Perenco se negó a renegociar los contratos y mantiene una deuda por 327 millones de dólares, derivada de una polémica repartición de ganancias, por lo que Quito está confiscando su producción, de unos 21.000 b/d.
Esa empresa fue acusada hace un mes de abandonar los campos, los cuales están siendo operados por una firma de la estatal Petroecuador.
En el primer semestre de 2009, el país sudamericano -el miembro más pequeño de la OPEP- extrajo unos 495.000 b/d, de los cuales un 43% correspondió a las empresas extranjeras.
