Indígenas quichuas se enfrentaron la noche del jueves por tierras ubicadas en el sector de Kutu Kachi, en la selva amazónica. Un enfrentamiento armado entre indígenas quichuas se registró la noche del jueves en una apartada zona del interior selvático de Pastaza llamado Kutu Kachi, ubicado a 15 horas a pie desde Sarayaku.
Los heridos, que fueron evacuados por separado, son Rudi Ortiz y Wilson Malaver, dirigentes de Sarayaku, quienes fueron sacados en una avioneta de la empresa quichua Sankip; mientras que Oswaldo Gualinga salió desde Moretecocha en un vuelo de Alas de Socorro. Los dos primeros están hospitalizados en el Hospital Puyo y el tercero en el Hospital Vozandes de Shell.
El eje de la confrontación, que se inició en 2007, es la ubicación de varias familias pertenecientes a un mismo clan, Gualinga, quienes insisten en su derecho de residir en Kutu Kachi, territorio habitado por sus antepasados. Sergio Gualinga, expulsado de Sarayaku, es quien lidera la defensa.
Hace cinco meses, la Corte Constitucional reconoció a la familia Gualinga sus derechos sobre ese dominio territorial ancestral que abarcaría 10 mil hectáreas de selva, entre los ríos Chuyayaku y Landayaku. En esa ocasión, el clan agradeció al presidente Correa porque "ayudó a que la Corte haga justicia".
Sin embargo, para la comunidad de Sarayacu el tema no pasa por la defensa territorial ni porque se trate de un dominio ancestral sino por intereses particulares.
"Se ha buscado crear ese asentamiento para facilitar el ingreso a esta zona de empresas petroleras y poder explotar el pozo Landayaku. No vamos a permitir bajo ningún concepto que se quede allí la familia Gualinga ni que ingrese la petrolera", advirtió el dirigente histórico de Sarayaku y actual presidente de la Conaie, Marlon Santi.
Del mismo modo, el líder dijo que emprenderá acciones legales en contra de Sergio Gualinga, a quien responsabilizó de los enfrentamientos.
El dirigente, quien llegó a Shell a las 06:00 de ayer, pidió la destitución de la gobernadora Raquel Morante y del comandante de Policía, Guillermo Balarezo "por hacer caso omiso a lo que dispone la Constitución".
Ello porque no dieron paso a un pedido realizado por Sarayaku de brindar protección para pedir la salida de los Gualinga de Kutu Kachi.
Hasta el cierre de esta edición no se pudo confirmar si el enfrentamiento dejó víctimas mortales, aunque los primeros informes señalaron como saldo dos muertos.
Un enfrentamiento armado entre indígenas quichuas se registró la noche del jueves en una apartada zona del interior selvático de Pastaza llamado Kutu Kachi, ubicado a 15 horas a pie desde Sarayaku.
Los heridos, que fueron evacuados por separado, son Rudi Ortiz y Wilson Malaver, dirigentes de Sarayaku, quienes fueron sacados en una avioneta de la empresa quichua Sankip; mientras que Oswaldo Gualinga salió desde Moretecocha en un vuelo de Alas de Socorro. Los dos primeros están hospitalizados en el Hospital Puyo y el tercero en el Hospital Vozandes de Shell.
El eje de la confrontación, que se inició en 2007, es la ubicación de varias familias pertenecientes a un mismo clan, Gualinga, quienes insisten en su derecho de residir en Kutu Kachi, territorio habitado por sus antepasados. Sergio Gualinga, expulsado de Sarayaku, es quien lidera la defensa.
Hace cinco meses, la Corte Constitucional reconoció a la familia Gualinga sus derechos sobre ese dominio territorial ancestral que abarcaría 10 mil hectáreas de selva, entre los ríos Chuyayaku y Landayaku. En esa ocasión, el clan agradeció al presidente Correa porque "ayudó a que la Corte haga justicia".
Sin embargo, para la comunidad de Sarayacu el tema no pasa por la defensa territorial ni porque se trate de un dominio ancestral sino por intereses particulares.
"Se ha buscado crear ese asentamiento para facilitar el ingreso a esta zona de empresas petroleras y poder explotar el pozo Landayaku. No vamos a permitir bajo ningún concepto que se quede allí la familia Gualinga ni que ingrese la petrolera", advirtió el dirigente histórico de Sarayaku y actual presidente de la Conaie, Marlon Santi.
Del mismo modo, el líder dijo que emprenderá acciones legales en contra de Sergio Gualinga, a quien responsabilizó de los enfrentamientos.
El dirigente, quien llegó a Shell a las 06:00 de ayer, pidió la destitución de la gobernadora Raquel Morante y del comandante de Policía, Guillermo Balarezo "por hacer caso omiso a lo que dispone la Constitución".
Ello porque no dieron paso a un pedido realizado por Sarayaku de brindar protección para pedir la salida de los Gualinga de Kutu Kachi.
Hasta el cierre de esta edición no se pudo confirmar si el enfrentamiento dejó víctimas mortales, aunque los primeros informes señalaron como saldo dos muertos. (HOY)
El eje de la confrontación, que se inició en 2007, es la ubicación de varias familias pertenecientes a un mismo clan, Gualinga, quienes insisten en su derecho de residir en Kutu Kachi, territorio habitado por sus antepasados. Sergio Gualinga, expulsado de Sarayaku, es quien lidera la defensa.
Hace cinco meses, la Corte Constitucional reconoció a la familia Gualinga sus derechos sobre ese dominio territorial ancestral que abarcaría 10 mil hectáreas de selva, entre los ríos Chuyayaku y Landayaku. En esa ocasión, el clan agradeció al presidente Correa porque "ayudó a que la Corte haga justicia".
Sin embargo, para la comunidad de Sarayacu el tema no pasa por la defensa territorial ni porque se trate de un dominio ancestral sino por intereses particulares.
"Se ha buscado crear ese asentamiento para facilitar el ingreso a esta zona de empresas petroleras y poder explotar el pozo Landayaku. No vamos a permitir bajo ningún concepto que se quede allí la familia Gualinga ni que ingrese la petrolera", advirtió el dirigente histórico de Sarayaku y actual presidente de la Conaie, Marlon Santi.
Del mismo modo, el líder dijo que emprenderá acciones legales en contra de Sergio Gualinga, a quien responsabilizó de los enfrentamientos.
El dirigente, quien llegó a Shell a las 06:00 de ayer, pidió la destitución de la gobernadora Raquel Morante y del comandante de Policía, Guillermo Balarezo "por hacer caso omiso a lo que dispone la Constitución".
Ello porque no dieron paso a un pedido realizado por Sarayaku de brindar protección para pedir la salida de los Gualinga de Kutu Kachi.
Hasta el cierre de esta edición no se pudo confirmar si el enfrentamiento dejó víctimas mortales, aunque los primeros informes señalaron como saldo dos muertos.
Un enfrentamiento armado entre indígenas quichuas se registró la noche del jueves en una apartada zona del interior selvático de Pastaza llamado Kutu Kachi, ubicado a 15 horas a pie desde Sarayaku.
Los heridos, que fueron evacuados por separado, son Rudi Ortiz y Wilson Malaver, dirigentes de Sarayaku, quienes fueron sacados en una avioneta de la empresa quichua Sankip; mientras que Oswaldo Gualinga salió desde Moretecocha en un vuelo de Alas de Socorro. Los dos primeros están hospitalizados en el Hospital Puyo y el tercero en el Hospital Vozandes de Shell.
El eje de la confrontación, que se inició en 2007, es la ubicación de varias familias pertenecientes a un mismo clan, Gualinga, quienes insisten en su derecho de residir en Kutu Kachi, territorio habitado por sus antepasados. Sergio Gualinga, expulsado de Sarayaku, es quien lidera la defensa.
Hace cinco meses, la Corte Constitucional reconoció a la familia Gualinga sus derechos sobre ese dominio territorial ancestral que abarcaría 10 mil hectáreas de selva, entre los ríos Chuyayaku y Landayaku. En esa ocasión, el clan agradeció al presidente Correa porque "ayudó a que la Corte haga justicia".
Sin embargo, para la comunidad de Sarayacu el tema no pasa por la defensa territorial ni porque se trate de un dominio ancestral sino por intereses particulares.
"Se ha buscado crear ese asentamiento para facilitar el ingreso a esta zona de empresas petroleras y poder explotar el pozo Landayaku. No vamos a permitir bajo ningún concepto que se quede allí la familia Gualinga ni que ingrese la petrolera", advirtió el dirigente histórico de Sarayaku y actual presidente de la Conaie, Marlon Santi.
Del mismo modo, el líder dijo que emprenderá acciones legales en contra de Sergio Gualinga, a quien responsabilizó de los enfrentamientos.
El dirigente, quien llegó a Shell a las 06:00 de ayer, pidió la destitución de la gobernadora Raquel Morante y del comandante de Policía, Guillermo Balarezo "por hacer caso omiso a lo que dispone la Constitución".
Ello porque no dieron paso a un pedido realizado por Sarayaku de brindar protección para pedir la salida de los Gualinga de Kutu Kachi.
Hasta el cierre de esta edición no se pudo confirmar si el enfrentamiento dejó víctimas mortales, aunque los primeros informes señalaron como saldo dos muertos. (HOY)
