El incremento mundial de más de 100 millones de personas con desnutrición crónica en 2009 motivó a la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) a convertirse en un eje director de una política mundial en soberanía alimentaria.
Actualmente, una de cada seis personas tiene problemas graves de nutrición a nivel mundial. Según Jacques Diouf, director general de la FAO, esto se debe a la crisis económica de 2008 que, entre otras cosas, incrementó el costo de los insumos agrícolas.
Los fertilizantes elevaron sus costos en el 176%; 70% el de las semillas, y 75% el de los piensos.
Asimismo, la reducción del empleo y la caída de remesas, así como de la inversión extranjera en países de América Latina son un escenario desfavorable para el agricultor.
Para contrarrestar esta situación, expertos recomiendan que la comunidad internacional destine el 17% de la asistencia oficial para el desarrollo de la agricultura. Ese fue el nivel de inversión que salvó a Asia y a América Latina de la hambruna en los años setenta.
Otra de las medidas tomadas tomadas por la FAO fue declarar al 16 de octubre como el Día Mundial de la Alimentación. Esto comprometió a 150 países a cambiar sus políticas sociales y económicas a favor de los sectores más vulnerables.
Entre estos países se encuentra Ecuador, aquí se desarrollaron diversas actividades para promover una buena nutrición. En octubre se realizaron campañas en 52 mercados de la ciudad de Quito para capacitar a los vendedores sobre la importancia de una correcta alimentación. En ese mes, se logró informar y preparar a 3 500 comerciantes.
Eduardo Vergara, presidente de la Asociación de Empleados del Mercado Central, explicó que durante fechas específicas, el mercado regaló frutas a sus visitantes y les invitó a consumir alimentos más sanos.
Rosa Zambrano, vendedora del mercado, considera que estas alternativas mejorarán la alimentación de sus clientes.
Actualmente, una de cada seis personas tiene problemas graves de nutrición a nivel mundial. Según Jacques Diouf, director general de la FAO, esto se debe a la crisis económica de 2008 que, entre otras cosas, incrementó el costo de los insumos agrícolas.
Los fertilizantes elevaron sus costos en el 176%; 70% el de las semillas, y 75% el de los piensos.
Asimismo, la reducción del empleo y la caída de remesas, así como de la inversión extranjera en países de América Latina son un escenario desfavorable para el agricultor.
Para contrarrestar esta situación, expertos recomiendan que la comunidad internacional destine el 17% de la asistencia oficial para el desarrollo de la agricultura. Ese fue el nivel de inversión que salvó a Asia y a América Latina de la hambruna en los años setenta.
Otra de las medidas tomadas tomadas por la FAO fue declarar al 16 de octubre como el Día Mundial de la Alimentación. Esto comprometió a 150 países a cambiar sus políticas sociales y económicas a favor de los sectores más vulnerables.
Entre estos países se encuentra Ecuador, aquí se desarrollaron diversas actividades para promover una buena nutrición. En octubre se realizaron campañas en 52 mercados de la ciudad de Quito para capacitar a los vendedores sobre la importancia de una correcta alimentación. En ese mes, se logró informar y preparar a 3 500 comerciantes.
Eduardo Vergara, presidente de la Asociación de Empleados del Mercado Central, explicó que durante fechas específicas, el mercado regaló frutas a sus visitantes y les invitó a consumir alimentos más sanos.
Rosa Zambrano, vendedora del mercado, considera que estas alternativas mejorarán la alimentación de sus clientes.