lunes, 23 de noviembre de 2009

Chávez pide enlistarse en milicias


El presidente venezolano, Hugo Chávez, anunció la noche del sábado pasado la llegada al país de unos 300 tanques de guerra y vehículos blindados de fabricación rusa, y ordenó a los militantes de su Partido Socialista Unidos de Venezuela (PSUV), que formen parte de las milicias y los cuerpos armados.

Chávez explicó ante sus partidarios que no es un secreto la llegada de estos vehículos de última tecnología facilitados por "nuestros hermanos y socios estratégicos, los rusos". El mandatario añadió: "Todo eso requiere ir organizando a los soldados que van a manejar y disparar. Por eso es necesario que todos los cuadros del PSUV formen parte de la milicia", arengó.

El líder bolivariano advirtió a quienes quieran enlistarse que no lo hagan por novelería o como un hobby "para que Chávez me vea marchar por aquí". Se trata de organizar a los campesinos donde labran la tierra, a los obreros en las fábricas, donde se puedan realizar verdaderos entrenamientos de combate, manifestó.

Chávez recordó que la nueva Ley de las Fuerzas Armadas venezolanas, consagradas como bolivarianas, contempla la figura de los cuerpos de combatientes entendidos como ciudadanos y ciudadanas que de manera voluntaria son registrados, organizados y adiestrados por el comando general de una Milicia Bolivariana.
Críticas a Colombia

Chávez aseguró que Venezuela se ha convertido en blanco en el mapa del imperio (EEUU) en América Latina, y para esto se vale de Gobiernos "serviles" como el de Álvaro Uribe.

Según el mandatario, una de las evidencias de sus afirmaciones, son las declaraciones realizadas la semana pasada por el presidente israelí Simón Peres en la Argentina, en donde señaló que Chávez desaparecerá. "Imagínense qué pasaría si uno dijera algo similar sobre ellos, el escándalo que se armaría", protestó.

Por otra parte, el mandatario aseguró que ha tendido la mano 100 veces a Colombia, después de haber recibido cachetadas. Y todo ello para mantener la paz en el vecindario.

Sin embargo, el líder, que congeló las relaciones con Bogotá en julio, reiteró que el acuerdo militar entre Colombia y los EEUU, origen de la actual crisis bilateral, "es lo más grave que ha ocurrido en 100 años para la región".
Movilización de tropas

El Gobierno colombiano decidió que una brigada móvil y dos batallones, que agrupan unos 2 000 hombres, refuercen la seguridad en la frontera con Venezuela como una medida preventiva luego de que Chávez mandara a derribar dos puentes fronterizos que unían los dos países.

Al respecto, el gobernante venezolano ironizó: "Los europeos deben creer que Chávez voló un puente como el de Brooklyn o del Golden Gate, cuando la verdad esos pasos fueron construidos ilegalmente y han servido por años como pasarelas de narcotraficantes y vendedores de armas que vienen desde Colombia para desestabilizar a Venezuela".

Indignación en Uganda

Funcionarios de Uganda (centro del África) se mostraron indignados luego de que Chávez cuestionara si el ex dictador africano Idi Amín fue tan brutal como se dice que fue. "Pensábamos que era un caníbal", dijo Chávez el viernes pasado y añadió: "Tengo dudas. Quizás Amín era un gran nacionalista, un patriota", informó el diario caraqueño El Universal.

Aunque no hay una cifra exacta, se estima que medio millón de personas fueron asesinadas durante el régimen de Amín entre 1971 y 1979, en el que los opositores del Gobierno eran torturados y ejecutados. La vocera del Movimiento Nacional de Resistencia de Uganda, Mary Karoro Okurut, señaló que cualquiera que ponga en duda los crímenes del dictador, debería visitar un especialista. (CRR)
Colombia habla de una reunión bilateral

Bogotá. El ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Jaime Bermúdez, insistió en que una manera de limar la crisis con Venezuela sería una cita entre los presidentes Álvaro Uribe y Hugo Chávez, pero sin agravios.

Según el alto cargo, "Colombia tiene interés de tener las mejores relaciones con todos los países del continente". El ministro colombiano dijo que expresiones como las utilizadas la semana pasada por Chávez contra él y contra Uribe, a quienes se refirió como "desgraciados", no amerita ninguna consideración.

Lo importante, subrayó, son los temas de fondo y explicó que hay que distinguir entre los agravios, que son provocaciones, y la prudencia que uno debe tener pensando en los intereses nacionales y no en los personales.

El canciller también explicó las críticas que lanzó contra la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur). "Precisamente (esos organismos) están constituidos para garantizar la paz en la región y cuando hay una manifestación explícita de un jefe de Estado con un lenguaje belicista, que habla con tonos ofensivos, lo lógico sería que Unasur se manifestara", indicó. (EFE)