El Ministerio de Coordinación de Desarrollo Social (MCDS) puso en marcha ayer la segunda fase del programa de Registro Social.
Según el MCDS, el proyecto es para crear una base de datos actualizada de los beneficiarios de los programas sociales, así como el ingreso de otros ciudadanos en estos proyectos gubernamentales.
Durante ocho meses, más de 500 brigadistas, divididos en equipos de cuatro investigadores y un supervisor cada uno, visitarán las 24 provincias. En total esperan visitar cerca de 420.000 hogares del país.
El MCDS creó cinco regionales (Quito, Cuenca, Portoviejo, Guayaquil y Ambato) para que encaminen el proceso a escala nacional. Para Quito se destinaron 90 personas que recorrerán las áreas Calderón y el Centro Histórico, donde hay mayor demanda.
A diferencia de la primera encuesta, que se realizó en 2008, se hace previo a la inscripción del beneficiario por teléfono, a través del número 1800 272727.
Según la ministra Jeannette Sánchez, la primera encuesta costó 15 millones de dólares, pero aún se desconoce cuánto será el monto total del segundo acercamiento. El censo tiene el margen de error de inclusión del 10%.
La autoridad de la Cartera explica que la encuesta se aplica en más de ocho países de la región, entre ellos Chile, Brasil y Colombia.
En Washington, EE.UU., donde la Ministra estuvo hace varios meses para tratar algunos temas de políticas de inclusión de la región, se validó la técnica del registro, “por ser un instrumento de alta tecnología para bajar el mal manejo de los fondos públicos en políticas sociales”, señaló Sánchez.
Desde agosto pasado, 280.000 personas se inscribieron en el registro. Este fue el caso de Jéssica Andrade, de 20 años, quien vive en el sector El Placer.
Comenta que se inscribió en abril: “vivo sola y no consigo trabajo, con el bono alimentaría a mi familia”.
Andrade vive con su abuela, Marcia Díaz, quien la ayuda. “Mi nieta es sola, no tiene a nadie, le damos la comidita”, señala la mujer, de 65 años, de actividad comerciante.
Ella fue encuestada ayer por el personal de la Unidad Técnica del Sistema de Identificación y Selección de Beneficiarios de Programas Sociales (Selben), que llegó hasta el sur oriente de la capital, en camionetas.
Actualmente, el bono de desarrollo del Programa de Protección Social (PPS), del Ministerio de Inclusión Económica y Social es de US$ 35.
El censo consta de 60 preguntas, dividido en siete aspectos. Allí, indicó un técnico del Selben, se indaga sobre las características de vivienda (tipo de construcción, suelo), información de bienes inmuebles que posea, ocupación del futuro beneficiario, zonificación, entre otros.
El domingo, solo en El Placer fueron encuestadas 8 familias de escasos recursos.
Gabriela Sandoval, de 19 años, participó en el proceso. Vive con sus dos hijos en El Placer alto, en un cuarto, que no supera los 5 metros de construcción.
La cuna de su bebé está cerca a la cocineta. “No tengo trabajo y no me alcanza el dinero que me dan mis padres”. Para ella, este proceso permite “que se enteren cómo vivimos los pobres”.
Según el MCDS, el proyecto es para crear una base de datos actualizada de los beneficiarios de los programas sociales, así como el ingreso de otros ciudadanos en estos proyectos gubernamentales.
Durante ocho meses, más de 500 brigadistas, divididos en equipos de cuatro investigadores y un supervisor cada uno, visitarán las 24 provincias. En total esperan visitar cerca de 420.000 hogares del país.
El MCDS creó cinco regionales (Quito, Cuenca, Portoviejo, Guayaquil y Ambato) para que encaminen el proceso a escala nacional. Para Quito se destinaron 90 personas que recorrerán las áreas Calderón y el Centro Histórico, donde hay mayor demanda.
A diferencia de la primera encuesta, que se realizó en 2008, se hace previo a la inscripción del beneficiario por teléfono, a través del número 1800 272727.
Según la ministra Jeannette Sánchez, la primera encuesta costó 15 millones de dólares, pero aún se desconoce cuánto será el monto total del segundo acercamiento. El censo tiene el margen de error de inclusión del 10%.
La autoridad de la Cartera explica que la encuesta se aplica en más de ocho países de la región, entre ellos Chile, Brasil y Colombia.
En Washington, EE.UU., donde la Ministra estuvo hace varios meses para tratar algunos temas de políticas de inclusión de la región, se validó la técnica del registro, “por ser un instrumento de alta tecnología para bajar el mal manejo de los fondos públicos en políticas sociales”, señaló Sánchez.
Desde agosto pasado, 280.000 personas se inscribieron en el registro. Este fue el caso de Jéssica Andrade, de 20 años, quien vive en el sector El Placer.
Comenta que se inscribió en abril: “vivo sola y no consigo trabajo, con el bono alimentaría a mi familia”.
Andrade vive con su abuela, Marcia Díaz, quien la ayuda. “Mi nieta es sola, no tiene a nadie, le damos la comidita”, señala la mujer, de 65 años, de actividad comerciante.
Ella fue encuestada ayer por el personal de la Unidad Técnica del Sistema de Identificación y Selección de Beneficiarios de Programas Sociales (Selben), que llegó hasta el sur oriente de la capital, en camionetas.
Actualmente, el bono de desarrollo del Programa de Protección Social (PPS), del Ministerio de Inclusión Económica y Social es de US$ 35.
El censo consta de 60 preguntas, dividido en siete aspectos. Allí, indicó un técnico del Selben, se indaga sobre las características de vivienda (tipo de construcción, suelo), información de bienes inmuebles que posea, ocupación del futuro beneficiario, zonificación, entre otros.
El domingo, solo en El Placer fueron encuestadas 8 familias de escasos recursos.
Gabriela Sandoval, de 19 años, participó en el proceso. Vive con sus dos hijos en El Placer alto, en un cuarto, que no supera los 5 metros de construcción.
La cuna de su bebé está cerca a la cocineta. “No tengo trabajo y no me alcanza el dinero que me dan mis padres”. Para ella, este proceso permite “que se enteren cómo vivimos los pobres”.