El volcán Tungurahua, cuyo actual proceso eruptivo empezó en 1999, ha registrado en los últimos días un incremento en su actividad sísmica, tras casi seis meses de relativa calma, informó ayer el Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional.
Un último informe del IG señala que “luego de varios meses de actividad sísmica muy baja y relacionada únicamente con eventos de fractura (de rocas), en los últimos tres días se han presentado eventos relacionados con movimientos de fluidos internos”.
El informe precisa que en las últimas 24 horas se ha registrado un ligero temblor de carácter vulcano-tectónico y 9 seísmos ligeros, denominados de largo periodo, relacionados con el movimiento de fluidos en el interior del Tungurahua.
“Por el número y energía de los eventos recientes, el nivel de actividad puede aún considerarse como bajo; sin embargo, muestra una clara tendencia ascendente en los últimos días”, precisa el reporte del Instituto.
Además, señala que se han producido emisiones de vapor de agua, en forma de nubes, con cantidades moderadas de ceniza, que por efecto del viento se han dirigido hacia el norte y suroeste de la montaña.
Uno de esos penachos alcanzó una altura de un kilómetro sobre el cráter y se ha reportado que en la localidad de El Manzano, al suroeste, cayó levemente ceniza, asociada con las emisiones registradas ayer.
En alerta
Los científicos del IG, que vigilan la montaña, esperan leves caídas de ceniza en los alrededores del volcán, sobre todo en la zona occidental.
Además, pobladores y vigilantes de las cercanías del volcán han escuchado ligeros ruidos, como bramidos. EFE
Un último informe del IG señala que “luego de varios meses de actividad sísmica muy baja y relacionada únicamente con eventos de fractura (de rocas), en los últimos tres días se han presentado eventos relacionados con movimientos de fluidos internos”.
El informe precisa que en las últimas 24 horas se ha registrado un ligero temblor de carácter vulcano-tectónico y 9 seísmos ligeros, denominados de largo periodo, relacionados con el movimiento de fluidos en el interior del Tungurahua.
“Por el número y energía de los eventos recientes, el nivel de actividad puede aún considerarse como bajo; sin embargo, muestra una clara tendencia ascendente en los últimos días”, precisa el reporte del Instituto.
Además, señala que se han producido emisiones de vapor de agua, en forma de nubes, con cantidades moderadas de ceniza, que por efecto del viento se han dirigido hacia el norte y suroeste de la montaña.
Uno de esos penachos alcanzó una altura de un kilómetro sobre el cráter y se ha reportado que en la localidad de El Manzano, al suroeste, cayó levemente ceniza, asociada con las emisiones registradas ayer.
En alerta
Los científicos del IG, que vigilan la montaña, esperan leves caídas de ceniza en los alrededores del volcán, sobre todo en la zona occidental.
Además, pobladores y vigilantes de las cercanías del volcán han escuchado ligeros ruidos, como bramidos. EFE