jueves, 21 de enero de 2010

La Corte deja solos a los conjueces en su defensa


El pleno de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) no analizará la actuación de los conjueces del caso Filanbanco, quienes cambiaron el delito para los acusados, entre ellos, los hermanos Isaías.

Lo que sí decidió la Corte es formar una comisión para que elabore un comunicado en el que el organismo aclarará que no avala ninguna decisión tomada por los jueces o conjueces, “porque cada uno es responsable de sus fallos”.

En el documento con el que la Corte defenderá su independencia, se ratifica que no respalda ninguna resolución y en este caso menos que en otro.

La comisión estará presidida por el juez Galo Martínez y elaborará el documento que se hará público hoy a través del presidente de la Corte, José Vicente Troya.

En la sesión ordinaria de ayer, efectuada en reserva en el quinto piso de la Corte, los jueces analizaron la resolución en el juicio Filanbanco.

Se conoció que ninguno de los miembros de la Corte estuvo de acuerdo con el pronunciamiento de los conjueces de la primera sala de lo Penal, quienes resolvieron cambiar la figura delictiva para los acusados de la quiebra de Filanbanco, de peculado a falsificación de balances contables.

El criterio lo comparte también el presidente del Consejo de la Judicatura (CJ), Benjamín Cevallos, para quien la providencia es “una verdadera acrobacia mental y legal”.

Entre otras falencias, Cevallos critica el hecho de que los conjueces “angustiaron a la defensa” al notificar su pronunciamiento el viernes por la tarde, acortando el tiempo para interponer recursos. Cita que los conjueces mencionan a varios tratadistas para concluir que los jueces anteriores “se equivocaron al señalar que en este caso hubo peculado”.

Con los tres conjueces suspendidos, el pleno del Consejo de la Judicatura (CJ) dejó en manos de Troya la designación de los nuevos conjueces que conocerán el pedido de revocatoria del fallo, solicitado por la Fiscalía, la Contraloría y la Procuraduría.

El titular del Consejo aclaró que le corresponde al titular de la Corte nombrar a los nuevos conjueces, atribución que le corresponde en vista de una resolución de ese mismo organismo con el que se reguló el período de transición.

Por lo pronto, la Corte designó a Luis Pacheco para el despacho de Mario Rojas, uno de los conjueces suspendidos, quien a su vez estaba a cargo de la oficina del juez Luis Moyano, actualmente de vacaciones.

En tanto, Cevallos anunció que Walter Mazzini, Edwin Salazar y Rojas podrán presentar pruebas de descargo en el sumario abierto en su contra. Aclaró que esta no es una sanción, sino una medida preventiva, pues el castigo o absolución solo se decidirá después de los 90 días de investigación.

Jueces recomendaron
Los nombres de Mario Rojas, Walter Mazzini y Edwin Salazar fueron recomendados por los jueces Luis Moyano, Hernán Ulloa y Luis Abarca.

Según el presidente de la Judicatura, el pleno del organismo los eligió tras recibir informes de los jueces proponentes, en este caso, los miembros de las salas de lo Penal.
Ex CCCC acusó a Yépez y Pesántez de prevaricato

En octubre del 2000, la ex Comisión de Control Cívico de la Corrupción (CCCC) determinó indicios de prevaricato en contra de la ex fiscal Mariana Yépez y del actual fiscal Washington Pesántez, quienes “habrían retardado el ejercicio de la acción penal” en contra de los hermanos Isaías “permitiendo su impunidad”.

El documento indica que la Unidad Especial de Investigaciones Financieras de la Fiscalía General del Estado elaboró un informe sugiriendo la prisión preventiva de los hermanos Roberto y William Isaías por presunto peculado. Pero agrega que el entonces asesor de la Fiscalía, Washington Pesántez, solicitó a la cúpula de la Policía que vigile a los ex banqueros, ya que estaba a punto de solicitarse su detención.

Al día siguiente, el mismo Pesántez se retractó del pedido y cuando la ex fiscal Yépez formuló la excitativa y luego dispuso la prisión de los hermanos, ellos ya habían salido del país.