Washington Pesántez, rechazó la resolución aprobada por la Asamblea Nacional de Ecuador en la que se pide su renuncia por haber adelantado criterios sobre la inocencia de su esposa, Aliz Borja, en torno al accidente de tránsito en el que falleció la ciudadana de origen colombiano, Natalie Emme.
“De manera respetuosa pero enfática debo decir que, fiel a mis principios, mi decisión es permanecer al frente de la institución a la que sirvo apegado a la Ley”, dijo Pesántez, al asegurar que la decisión de la Asamblea, con mayoría oficialista, está por debajo del Mandato 01 de la Asamblea Constituyente que redactó la nueva Carta Política.
“El Mandato es jerárquicamente superior a la resolución”, afirmó al explicar que para destituir a cualquier funcionario de la Fiscalía se debe observar el debido proceso.
De todas maneras, indicó que ha dispuesto que se inicien los sumarios administrativos, a través de departamentos de Régimen Disciplinario, a fin de que se determinen si su actuación amerita una sanción.
El fiscal ratificó su total independencia en las investigaciones que se realizan en torno al proceso penal pero, ratificó la inocencia de su esposa. Dijo, incluso, que tanto ella como el policía, quien se adjudica la autoría del accidente, están dispuestos a someterse al detector de mentiras.
Acompañado por los fiscales distritales y empleados de la Fiscalía, Pesántez recordó que fue designado en 2007, con consenso del entonces Congreso Nacional, pero que eso “no implica ni ha implicado ningún compromiso personal, político o partidista”.
Lamentó que ciertos sectores intenten utilizar la tragedia y quieran convertirla en un tema político para desestabilizar la justicia.
‘Alianza Madera de Guerrero-Filanbanco’
Además Pesántez defendió las acciones emprendidas por su parte en el caso Filanbanco. “He sido el funcionario que más frontalmente ha luchado en los últimos años en este caso”.
En este contexto recordó que asistió personalmente a Estados Unidos a pedir la extradición cuando ese juicio “estuvo dormido por años”. Asimismo mostró varios oficios en el que –dijo- ha pedido que se llame a los hermanos Willliam y Roberto Isaías, ex propietarios de la institución bancaria, a juicio por peculado.
Sostuvo que es “sintomático” que después de haber sido el primer funcionario del Estado en reaccionar ante la providencia mediante la cual los conjueces Walter Mazzini, Mario Rojas y Edwin Salazar, cambiaron el delito de peculado por falsificación de balances, un grupo de asambleístas hayan pedido su renuncia.
Aunque precisó que “algunos, no todos” los 58 legisladores que solicitaron su dimisión están actuando claramente a favor de los intereses de los ex accionistas.
“Hay que investigar quiénes están a favor (de los Isías) tendiendo un manto de impunidad” y no dudó en afirmar que “básicamente, yo detecto aquí una aliación, una alianza de esas tradicionales, llamada Madera de Guerrero-Filanbanco”.
“De manera respetuosa pero enfática debo decir que, fiel a mis principios, mi decisión es permanecer al frente de la institución a la que sirvo apegado a la Ley”, dijo Pesántez, al asegurar que la decisión de la Asamblea, con mayoría oficialista, está por debajo del Mandato 01 de la Asamblea Constituyente que redactó la nueva Carta Política.
“El Mandato es jerárquicamente superior a la resolución”, afirmó al explicar que para destituir a cualquier funcionario de la Fiscalía se debe observar el debido proceso.
De todas maneras, indicó que ha dispuesto que se inicien los sumarios administrativos, a través de departamentos de Régimen Disciplinario, a fin de que se determinen si su actuación amerita una sanción.
El fiscal ratificó su total independencia en las investigaciones que se realizan en torno al proceso penal pero, ratificó la inocencia de su esposa. Dijo, incluso, que tanto ella como el policía, quien se adjudica la autoría del accidente, están dispuestos a someterse al detector de mentiras.
Acompañado por los fiscales distritales y empleados de la Fiscalía, Pesántez recordó que fue designado en 2007, con consenso del entonces Congreso Nacional, pero que eso “no implica ni ha implicado ningún compromiso personal, político o partidista”.
Lamentó que ciertos sectores intenten utilizar la tragedia y quieran convertirla en un tema político para desestabilizar la justicia.
‘Alianza Madera de Guerrero-Filanbanco’
Además Pesántez defendió las acciones emprendidas por su parte en el caso Filanbanco. “He sido el funcionario que más frontalmente ha luchado en los últimos años en este caso”.
En este contexto recordó que asistió personalmente a Estados Unidos a pedir la extradición cuando ese juicio “estuvo dormido por años”. Asimismo mostró varios oficios en el que –dijo- ha pedido que se llame a los hermanos Willliam y Roberto Isaías, ex propietarios de la institución bancaria, a juicio por peculado.
Sostuvo que es “sintomático” que después de haber sido el primer funcionario del Estado en reaccionar ante la providencia mediante la cual los conjueces Walter Mazzini, Mario Rojas y Edwin Salazar, cambiaron el delito de peculado por falsificación de balances, un grupo de asambleístas hayan pedido su renuncia.
Aunque precisó que “algunos, no todos” los 58 legisladores que solicitaron su dimisión están actuando claramente a favor de los intereses de los ex accionistas.
“Hay que investigar quiénes están a favor (de los Isías) tendiendo un manto de impunidad” y no dudó en afirmar que “básicamente, yo detecto aquí una aliación, una alianza de esas tradicionales, llamada Madera de Guerrero-Filanbanco”.