sábado, 23 de enero de 2010

El petróleo termina en fuerte baja por segunda semana consecutiv


Los precios del petróleo concluían hoy la semana en fuerte baja, hundiéndose en torno a los $73, en un mercado que reevaluaba con preocupación el estado de la oferta y la demanda. Hacia las 17:00 GMT, el barril de Brent del Mar del Norte negociado en Londres para entrega en febrero perdía $1,38 a $73,20.

Tras una tímida recuperación al inicio de la sesión, los precios comenzaron a aumentar sus pérdidas a medida que avanzaba la jornada y se hundieron hasta $72,87 en Londres y $74,58 en Nueva York, sus niveles más bajos desde el 22 de diciembre.

De este modo, los precios concluyen por segunda semana consecutiva en fuerte baja. Habían perdido cinco dólares la semana anterior y en esta dejan cuatro dólares en el camino.

Los precios del crudo habían sufrido el miércoles, como los otros mercados, el temor de que China tomase medidas para evitar el recalentamiento de su economía.

Las presiones se reforzaron el jueves con la publicación del informe semanal del Departamento norteamericano de Energía (DoE), que mostró la persistente debilidad del consumo en Estados Unidos, en retroceso de 1,8% en las últimas cuatro semanas con respecto a igual periodo el año pasado.

"La demanda norteamericana sigue siendo poco brillante y continúa a la espera de una mejora de la producción industrial y del transporte por camiones", subrayó la experta Amrita Sen, de Barclays Capital.

Un tema que preocupó particularmente a los inversores fue una brutal desaceleración de las actividades de las refinerías, que bajaron su índice de utilización a 78,4% para ajustarse a un débil consumo.

"Se trata de su nivel de actividad más bajo de los últimos 20 años para una semana que no estuvo afectada por un huracán", indicó Peter Beutel, fundador del gabinete Cameron Hanover.

Para completar el panorama, se sumaron los temores provocados por el discurso del presidente norteamericano Barack Obama, que anunció su intención de limitar el tamaño y la actividad de los bancos. AFP