domingo, 8 de noviembre de 2009

Primer Mandatario publicará libro en el que expone el saqueo y la destrucción al que fue sometido el país




Durante el Enlace Ciudadano 145, el Presidente de la República, Rafael Correa, anunció que en días pasados concluyó la redacción de un libro en el que expone como se destruyó y se saqueó al país desde la postguerra hasta el 2005.

“Ecuador: De Banana Republic a la no República” es el título que llevara el texto que el Jefe de Estado espera se publique a mediados del mes de diciembre de 2009. Al momento lo están revisando algunas casas editoriales, reveló.

Sobre el contenido de la obra explicó que en décadas pasadas se denominaba a las naciones sudamericanas de forma despectiva como “bananas republics” debido a que eran productores y dependían solo de la exportación del banano.

Eso –dijo- tenía muchas connotaciones porque no existían industrias, el mayor factor de producción era la tierra, y por lo tanto los más ricos eran los terratenientes, no había una clase capitalista moderna.

Señaló que incluso hasta eso era menos malo que la destrucción que se hizo en los siguientes años que convirtió a nuestro país en una “no república” en la que mandaba más “un burócrata apátrida del Fondo Monetario Internacional que los propios ecuatorianos. Donde los banqueros que nos habían quebrado seguían en completa impunidad, donde las transnacionales se llevaban el petróleo en peso, donde supuestos empresarios no tenían empleados porque todos eran tercerizados, donde no se respetaba la soberanía del país”.

Otros aspectos que se incluyen en el libro son los absurdos que se inventaron en gobiernos anteriores como los fondos de fideicomisos petroleros (Feirep, Feiseh, etc), que consistía en un supuesto ahorro pese a que el país registraba un deficit presupuestario, lo que implicaba que el gobierno tenía que endeudarse "más caro, buscando plata".

Las renegociaciones de la deuda, la crisis bancaria, el Gutierrato son otros de los temas que el Presidente considera que serán un aporte para que los ecuatorianos no se dejen engañar nunca más.