Arroceros pequeños y medianos, piladores e industriales de cantones como Daule, Yaguachi, Salitre, Jujan, Samborondón, Naranjal y de varios sectores de la provincia de Los Ríos, denunciaron el ingreso de arroz peruano al país.
Según los arroceros del país, el producto llega en grandes cantidades y es empacado y vendido como ecuatoriano, sin pagar impuestos. Nadie está haciendo algo para detener esta situación", refiere la denuncia.
Los productores de la gramínea, señalaron que este hecho ha ocasionado la caída del precio interno, pues aunque el costo oficial del saco es de $28, se está comercializando entre $23 y $24, tendiendo a la baja.
Además, el gremio manifestó que el Gobierno únicamente comprará el 31% de las 640 mil toneladas de arroz perteneciente a la cosecha de invierno. "Una situación preocupante puesto que 590 mil toneladas no tendrán en dónde venderse", señalaron.
Colombia, país donde se pensó que se podría exportar, advirtió que no necesita el alimento, complicando aún más su condición, pues los arroceros también comentaron que todos los centros de acopio y silos contratados por el Gobierno todavía están llenos con arroz que fue comprado anteriormente.
Ante tales problemáticas, se resolvió convocar a una reunión de carácter urgente al Ministro de Agricultura (Magap) Ramón Espinel, para buscar una solución a la posible quiebra del sector.
Según los arroceros del país, el producto llega en grandes cantidades y es empacado y vendido como ecuatoriano, sin pagar impuestos. Nadie está haciendo algo para detener esta situación", refiere la denuncia.
Los productores de la gramínea, señalaron que este hecho ha ocasionado la caída del precio interno, pues aunque el costo oficial del saco es de $28, se está comercializando entre $23 y $24, tendiendo a la baja.
Además, el gremio manifestó que el Gobierno únicamente comprará el 31% de las 640 mil toneladas de arroz perteneciente a la cosecha de invierno. "Una situación preocupante puesto que 590 mil toneladas no tendrán en dónde venderse", señalaron.
Colombia, país donde se pensó que se podría exportar, advirtió que no necesita el alimento, complicando aún más su condición, pues los arroceros también comentaron que todos los centros de acopio y silos contratados por el Gobierno todavía están llenos con arroz que fue comprado anteriormente.
Ante tales problemáticas, se resolvió convocar a una reunión de carácter urgente al Ministro de Agricultura (Magap) Ramón Espinel, para buscar una solución a la posible quiebra del sector.
