Hoy asume el control de las operaciones militares en la frontera norte, el general Wagner Bravo.
Ayer el ministro de Defensa, Javier Ponce, aclaró que el país cuenta con unas FF.AA. disuasivas tras la recuperación de la capacidad operativa con la adquisición de nuevos aviones de combate, helicópteros, radares y equipos de comunicación.
Bravo, como nuevo comandante de la Fuerza de Tarea Nº 1, tiene la responsabilidad de cumplir la disposición presidencial. Esta brigada tiene más de 7.500 soldados en las distintas brigadas, batallones y destacamentos ubicados estratégicamente a lo largo de los 720 kilómetros de frontera.
En febrero pasado, el ex comandante de la Fuerza de Tarea Nº 1, Bolívar Mena, manifestó que para incrementar el control en la frontera se construirán cinco nuevos destacamentos en Carchi y Esmeraldas, provincias que registran en los últimos meses un incremento en la inseguridad por la presencia de grupos irregulares armados de Colombia.
Los destacamentos se construirán en los sectores de La Carolina y Santa Bárbara, en Carchi; Zapallo Grande, La Tola y Timbiré, en Esmeraldas; con los que pasarán de 22 a 27 recintos militares ecuatorianos en los 720 kilómetros de frontera con Colombia.
Después del ataque en Angostura, a los 7.500 soldados permanentes desplazados en la frontera en los últimos años, se sumaron 3.500 provenientes del interior del país, especialistas y de élite. Los 11.000 uniformados representan el 22% del total de hombres de las FF.AA.
Con el incremento de operaciones militares y con la recuperación de la capacidad operativa, en el 2008, 153 bases clandestinas de las FARC fueron detectadas; en el 2009 subieron a 187 y en el presente año superan las 45.
En el 2009 se construyeron cinco destacamentos militares en Sucumbíos y Esmeraldas, en los sectores de General Farfán, El Palmar, Cantagallo, Selva Alegre y Cooper.
La ceremonia de cambio de mando está prevista para las 09:00 en la hacienda Huayra Huasi, en Atuntaqui (Imbabura), incautada a Óscar Caranqui, sentenciado por narcotráfico.
Ayer el ministro de Defensa, Javier Ponce, aclaró que el país cuenta con unas FF.AA. disuasivas tras la recuperación de la capacidad operativa con la adquisición de nuevos aviones de combate, helicópteros, radares y equipos de comunicación.
Bravo, como nuevo comandante de la Fuerza de Tarea Nº 1, tiene la responsabilidad de cumplir la disposición presidencial. Esta brigada tiene más de 7.500 soldados en las distintas brigadas, batallones y destacamentos ubicados estratégicamente a lo largo de los 720 kilómetros de frontera.
En febrero pasado, el ex comandante de la Fuerza de Tarea Nº 1, Bolívar Mena, manifestó que para incrementar el control en la frontera se construirán cinco nuevos destacamentos en Carchi y Esmeraldas, provincias que registran en los últimos meses un incremento en la inseguridad por la presencia de grupos irregulares armados de Colombia.
Los destacamentos se construirán en los sectores de La Carolina y Santa Bárbara, en Carchi; Zapallo Grande, La Tola y Timbiré, en Esmeraldas; con los que pasarán de 22 a 27 recintos militares ecuatorianos en los 720 kilómetros de frontera con Colombia.
Después del ataque en Angostura, a los 7.500 soldados permanentes desplazados en la frontera en los últimos años, se sumaron 3.500 provenientes del interior del país, especialistas y de élite. Los 11.000 uniformados representan el 22% del total de hombres de las FF.AA.
Con el incremento de operaciones militares y con la recuperación de la capacidad operativa, en el 2008, 153 bases clandestinas de las FARC fueron detectadas; en el 2009 subieron a 187 y en el presente año superan las 45.
En el 2009 se construyeron cinco destacamentos militares en Sucumbíos y Esmeraldas, en los sectores de General Farfán, El Palmar, Cantagallo, Selva Alegre y Cooper.
La ceremonia de cambio de mando está prevista para las 09:00 en la hacienda Huayra Huasi, en Atuntaqui (Imbabura), incautada a Óscar Caranqui, sentenciado por narcotráfico.