martes, 1 de marzo de 2011

Pescadores se tomaron puerto de Esmeraldas para rechazar asesinato

ESMERALDAS. Los pescadores no salieron ayer a laborar en protesta por la muerte de un compañero por los piratas de mar.

El asesinato del pescador Hólger Ubaldo Portocarrero, de 35 años, ocasionó la reacción airada de pescadores esmeraldeños que ayer se tomaron las instalaciones del puerto pesquero artesanal de Esmeraldas.

Portocarrero, de nacionalidad colombiana, se encontraba en faenas de pesca junto a dos ecuatorianos a bordo de la embarcación de fibra JH2, frente a las costas de Same, cantón Atacames, al sur de Esmeraldas, en la madrugada del pasado viernes, cuando fueron atracados por piratas.

Freddy Ávila, dirigente de los pescadores, dijo que ese no fue el único atraco que se cometió, pues otras seis naves también fueron víctimas de los piratas. “Anoche nos reunimos y resolvimos que todos en el puerto, pescadores, comercializadores y dueños de bodegas, pleguemos a un paro”.

En las paredes de las bodegas donde se almacena la pesca se colocaron carteles ofreciendo una recompensa de 5.000 dólares para quien proporcione información que permita la captura de los piratas.

Maura Oviedo, presidenta de la Cámara de Pesquería de Esmeraldas, dijo que ellos han sido reiterativos en exigir seguridad a las autoridades y es poco lo que se ha hecho. “Tengo las denuncias del asalto que fueron víctimas los tripulantes de las fibras María José, Sabina Maribel, Pablo Júnior. Ana Karen, JH2 y Candy, aún faltan por lo menos otras tres denuncias, todas estas embarcaciones fueron asaltadas entre el viernes y el sábado”.

Los pescadores presentaron ayer un pliego de peticiones al gobernador de la provincia, Lenín Lara.

Entre los pedidos se destacan que se haga realidad el ofrecimiento del presidente de la República de construir un muelle para la pesca artesanal, la creación de una fiscalía de delitos acuáticos y la compra de un helicóptero y varias lanchas rápidas para los patrullajes.

Róger Correa, uno de los pescadores asaltados, está hospitalizado porque le clavaron un arpón al oponerse al robo. Otra víctima, Jhonny Requené, dijo que eran seis los piratas que se movilizaban en una lancha verde en el asalto.