Espera. En el kilómetro 36 de la vía Alóag-Santo Domingo, los conductores observaban el retiro del material que cayó de las montañas.
El aguacero que soportó la noche del lunes el norte de país provocó seis derrumbes en la vía Alóag - Santo Domingo, y el desbordamiento de los ríos Tandapi, Pilatón y Toachi. El tránsito fue interrumpido.
En el kilómetro 36, un alud de lodo tapó la carretera y enterró un vehículo tanquero y siete camiones.
William López, dueño del tanquero, bajó del carro cuando escuchó un estruendo, rápidamente intentó regresar cuando vio que dos rocas gigantes caían por la pendiente. Cuando salió del carro para advertir a otros conductores del peligro observó que también decidieron abandonar los vehículos.
Los problemas de taponamiento por el material se repiten en los kilómetros 32, 51, 52, 53 y 54, donde la creciente del río destruyó parte de la calzada, arrasó dos puentes particulares y tres postes de las redes de energía eléctrica.
Fernando Hurtado, director de fiscalización de la Prefectura, confirmó que el derrumbe más fuerte se produjo en el kilómetro 36; anunció que la vía estaría habilitada en horas de la tarde.
Otro derrumbe ocurrido ayer a las 05:30 afectó el tránsito en la vía Calacalí - La Independencia, en el kilómetro 70, ubicado en el sector San Sebastián. Como medida de prevención las autoridades recomendaron el uso del desvío Tandayapa - San Mateo.
En ambos sectores el Consejo Provincial inició el despeje de los escombros, para permitir el paso de decenas de vehículos que esperaban la solución del problema.
Dos deslizamientos cortaron la carretera
La vía que une Riobamba con Guayaquil estuvo obstruida ayer en los sectores San Pablo, en el cantón Cumandá, y El Limón, en el cantón Pallatanga, debido a derrumbes. La maquinaria de la empresa Consermin retiró el material, desde las 07:00, pero el tránsito se restableció después del mediodía.
El alcalde de Cumandá, Hernán Vique, pidió apoyo al Gobierno para ejecutar obras de protección de la arteria. Los alcaldes de estos cantones están preocupados porque el material taponó el drenaje de la carretera y puede provocar su colapso.
Pasadas las 16 horas de ayer se habilitaron las tres vías que comunican la sierra con el litoral. Mientras se despejaban los escomboros, los viajeros cruzaban apie la zona afectada. La desesperación por llegar a sus sitios de destino ere evidente.
El aguacero que soportó la noche del lunes el norte de país provocó seis derrumbes en la vía Alóag - Santo Domingo, y el desbordamiento de los ríos Tandapi, Pilatón y Toachi. El tránsito fue interrumpido.
En el kilómetro 36, un alud de lodo tapó la carretera y enterró un vehículo tanquero y siete camiones.
William López, dueño del tanquero, bajó del carro cuando escuchó un estruendo, rápidamente intentó regresar cuando vio que dos rocas gigantes caían por la pendiente. Cuando salió del carro para advertir a otros conductores del peligro observó que también decidieron abandonar los vehículos.
Los problemas de taponamiento por el material se repiten en los kilómetros 32, 51, 52, 53 y 54, donde la creciente del río destruyó parte de la calzada, arrasó dos puentes particulares y tres postes de las redes de energía eléctrica.
Fernando Hurtado, director de fiscalización de la Prefectura, confirmó que el derrumbe más fuerte se produjo en el kilómetro 36; anunció que la vía estaría habilitada en horas de la tarde.
Otro derrumbe ocurrido ayer a las 05:30 afectó el tránsito en la vía Calacalí - La Independencia, en el kilómetro 70, ubicado en el sector San Sebastián. Como medida de prevención las autoridades recomendaron el uso del desvío Tandayapa - San Mateo.
En ambos sectores el Consejo Provincial inició el despeje de los escombros, para permitir el paso de decenas de vehículos que esperaban la solución del problema.
Dos deslizamientos cortaron la carretera
La vía que une Riobamba con Guayaquil estuvo obstruida ayer en los sectores San Pablo, en el cantón Cumandá, y El Limón, en el cantón Pallatanga, debido a derrumbes. La maquinaria de la empresa Consermin retiró el material, desde las 07:00, pero el tránsito se restableció después del mediodía.
El alcalde de Cumandá, Hernán Vique, pidió apoyo al Gobierno para ejecutar obras de protección de la arteria. Los alcaldes de estos cantones están preocupados porque el material taponó el drenaje de la carretera y puede provocar su colapso.
Pasadas las 16 horas de ayer se habilitaron las tres vías que comunican la sierra con el litoral. Mientras se despejaban los escomboros, los viajeros cruzaban apie la zona afectada. La desesperación por llegar a sus sitios de destino ere evidente.
