Las autoridades aeronáuticas y de transporte de Ecuador señalaron que utilizarán energía solar y eólica, entre otros sistemas que no afectan el medio ambiente, en el primer aeropuerto ecológico del mundo, que se construirá en el archipiélago de Galápagos, informó hoy la agencia pública de noticias Andes.
La información la ofrecieron el Subsecretario de Aeronáutica Civil, Guillermo Bernal, y la Ministra de Transporte y Obras Públicas, María de los Ángeles Duarte, durante la Conferencia de Alto Nivel en Seguridad y Medio Ambiente, que se celebra desde ayer en la isla ecuatoriana de San Cristóbal.
Duarte indicó que el primer aeropuerto ecológico, que se construirá en la isla de Baltra, utilizará menos energía que el actual terminal.
"El sistema de aire acondicionado que funciona con electricidad se basará en energía solar y eolítica, los materiales serán naturales para que no rompan con la estructura natural", explicó la secretaria de Estado.
Asimismo, el subsecretario de Aviación Civil acotó que la construcción del nuevo aeropuerto tiene tres fases: la edificación del terminal aeroportuario, la plataforma, y, posteriormente, la pista, que será de cemento.
Los materiales que van a ser utilizados para la construcción de este nuevo aeropuerto en Baltra "son básicamente favorables a la conservación del medio ambiente", dijo al explicar que el techo será elaborado en material refractario para que no genere temperatura en su interior.
Además, las paredes serán levantadas con materiales y pinturas que puedan mantenerse bajo poca iluminación; el agua que se utilice en el aeropuerto será reciclada y la energía utilizada será la solar.
En marzo pasado el titular de la Dirección de Aviación Civil de Ecuador, Fernando Guerrero, anunció que el archipiélago ecuatoriano de Galápagos, un reducto de biodiversidad única en el mundo, contará a partir de 2011 con el "primer aeropuerto ecológico del mundo".
Guerrero comentó que la denominación de "aeropuerto ecológico" se refiere a que "todo" en su infraestructura y procedimientos estará "sujeto a los estándares ambientales".
El aeropuerto, que requerirá una inversión de 21 millones de dólares, se construirá en la isla de Baltra, en el archipiélago de Galápagos, que se encuentra a unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales ecuatorianas.
El archipiélago debe su nombre a las grandes tortugas que lo habitan y es, desde 1978, Patrimonio Natural de la Humanidad designado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
La información la ofrecieron el Subsecretario de Aeronáutica Civil, Guillermo Bernal, y la Ministra de Transporte y Obras Públicas, María de los Ángeles Duarte, durante la Conferencia de Alto Nivel en Seguridad y Medio Ambiente, que se celebra desde ayer en la isla ecuatoriana de San Cristóbal.
Duarte indicó que el primer aeropuerto ecológico, que se construirá en la isla de Baltra, utilizará menos energía que el actual terminal.
"El sistema de aire acondicionado que funciona con electricidad se basará en energía solar y eolítica, los materiales serán naturales para que no rompan con la estructura natural", explicó la secretaria de Estado.
Asimismo, el subsecretario de Aviación Civil acotó que la construcción del nuevo aeropuerto tiene tres fases: la edificación del terminal aeroportuario, la plataforma, y, posteriormente, la pista, que será de cemento.
Los materiales que van a ser utilizados para la construcción de este nuevo aeropuerto en Baltra "son básicamente favorables a la conservación del medio ambiente", dijo al explicar que el techo será elaborado en material refractario para que no genere temperatura en su interior.
Además, las paredes serán levantadas con materiales y pinturas que puedan mantenerse bajo poca iluminación; el agua que se utilice en el aeropuerto será reciclada y la energía utilizada será la solar.
En marzo pasado el titular de la Dirección de Aviación Civil de Ecuador, Fernando Guerrero, anunció que el archipiélago ecuatoriano de Galápagos, un reducto de biodiversidad única en el mundo, contará a partir de 2011 con el "primer aeropuerto ecológico del mundo".
Guerrero comentó que la denominación de "aeropuerto ecológico" se refiere a que "todo" en su infraestructura y procedimientos estará "sujeto a los estándares ambientales".
El aeropuerto, que requerirá una inversión de 21 millones de dólares, se construirá en la isla de Baltra, en el archipiélago de Galápagos, que se encuentra a unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales ecuatorianas.
El archipiélago debe su nombre a las grandes tortugas que lo habitan y es, desde 1978, Patrimonio Natural de la Humanidad designado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).