El presidente de la Rafael Correa, descartó que el país vaya a salir de la dolarización en mayo como se rumora por parte de algunos medios de comunicación
Correa acusó a ciertos analistas opositores a su Gobierno de propagar rumores falsos buscando crear un ambiente de inestabilidad en la campaña electoral que vive el país.
El mandatario, pidió a la población que mantenga la calma y que no se deje llevar por esos rumores, a los que calificó de "cuento".
"Vamos a esperar a mayo y veremos quién mintió y quién dijo la verdad", dijo Correa.
No obstante, el jefe del Estado aceptó que la crisis financiera mundial incidirá en la economía ecuatoriana, aunque destacó las medidas adoptadas por su Gobierno para amortiguar dichos efectos.
Correa ha tomado varias decisiones de tipo arancelario y financiero y ha restringido las importaciones para evitar la salida de divisas y apoyar la producción nacional.
El mandatario considera que la dolarización es perjudicial para la economía nacional, sobre todo en un marco de crisis internacional, en el que se requiere de una política monetaria soberana, aunque ha repetido en varias ocasiones que no va a cancelarla.
Correa acusó a ciertos analistas opositores a su Gobierno de propagar rumores falsos buscando crear un ambiente de inestabilidad en la campaña electoral que vive el país.
El mandatario, pidió a la población que mantenga la calma y que no se deje llevar por esos rumores, a los que calificó de "cuento".
"Vamos a esperar a mayo y veremos quién mintió y quién dijo la verdad", dijo Correa.
No obstante, el jefe del Estado aceptó que la crisis financiera mundial incidirá en la economía ecuatoriana, aunque destacó las medidas adoptadas por su Gobierno para amortiguar dichos efectos.
Correa ha tomado varias decisiones de tipo arancelario y financiero y ha restringido las importaciones para evitar la salida de divisas y apoyar la producción nacional.
El mandatario considera que la dolarización es perjudicial para la economía nacional, sobre todo en un marco de crisis internacional, en el que se requiere de una política monetaria soberana, aunque ha repetido en varias ocasiones que no va a cancelarla.
