miércoles, 18 de febrero de 2009

Baja envío de remesas de migrantes en Azuay y Cañar en el 2008

miércoles, 18 de febrero de 2009. Las razones de la caída en el flujo de remesas, según el Banco Central del Ecuador (BCE), se originan porque los inmigrantes que viven en Estados Unidos redujeron sus gastos en bienes durables como las casas y automóviles. A esto se suma la crisis en España e Italia. Una caso publicado en el portal Migrante Ecuatoriano nombra a María Saldaña quien ha sufrido ajustes durante el año anterior. Su esposo, quien reside en Estados Unidos, envía con menos frecuencia y montos más bajos el dinero que obtiene de su trabajo en un restaurante. Como este ejemplo, un sin numero de familias azuayas recibieeon menos dinero durante el 2008.
Cifras del Banco Central del Ecuador, BCE, revelan que el flujo de remesas disminuyó. En el primer trimestre del año anterior, Azuay recibió 117,8 millones de dólares. En el segundo subió a 122,8 millones de dólares. El tercero descendió a 115,7 millones de dólares, mientras que el último bajó a 109,1 millones.
La provincia de Cañar no está libre de este fenómeno. En el primer trimestre recibió 54,7 millones de dólares, en el segundo fue de 50,3, en el tercero de 59,7 millones de dólares. En el último semestre se redujo a 50,2 millones. Sin embargo, la provincia en la que descendió más el flujo de remesas fue Loja. Recibió 64,7 millones de dólares en el primer trimestre de 2008. En el segundo descendió a 60,8 millones, en el tercero a 45,5 millones. Los últimos tres meses se redujo a 41,4 millones de dólares. A nivel nacional, el flujo de remesas estuvo a la baja. El pico más alto en los últimos tres años fue en el cuarto trimestre de 2007, en el que se receptó 825,6 millones de dólares.
Durante el año anterior, el primer trimestre descendió a 759,6 millones, para el segundo a 711,5 millones, en el tercero a 706,6 millones. En los últimos tres meses de 2008 alcanzó los 643,9 millones de dólares. Las razones de la caída en el flujo de remesas, según el BCE, se originan porque los estadounidenses redujeron sus gastos en bienes durables como las casas y automóviles. A esto se suma la crisis en España e Italia.