Fue la evidencia de que los próximos dos años de gobierno se caracterizarán por la pugna política y con la mirada puesta en las elecciones del 2012, el senador Mitch McConnell exhortó ayer a los senadores a que revoquen o acoten la ley de salud que decretó Obama, y a que impongan la austeridad al gobierno y lo reduzcan de tamaño.
“La única vía para lograr todas estas cosas es poner a alguien en la Casa Blanca que no las vete, expresó McConnell en un discurso ante la Heritage Foundation, institución de investigaciones de derecha.
El tono de confrontación del líder de la bancada republicana en la Cámara alta contrastó con la postura que asumió Obama el miércoles ante la reconfiguración en el Congreso, donde el Partido Republicano pasó a la mayoría en la Cámara de Representantes y conquistó nuevas bancas en el Senado.
El Presidente reiteró su gesto ayer e invitó a los líderes de las bancadas republicana y demócrata en el Congreso a una reunión el 18 de noviembre, y lanzó a su gabinete el desafío de mejorar la funcionalidad.
Además, Obama, quien partirá mañana para una gira por Asia, ha citado para el 2 de diciembre en la Casa Blanca a los gobernadores del país, la mayoría de ellos republicanos.
La intransigencia de McConnell se demostró al anunciar que no habría bilateralidad, sino unilateralidad en la ruta hacia la concertación de acuerdos. “Si el gobierno desea la cooperación deberá empezar a maniobrar conforme y hacia donde lo hagamos nosotros”, dijo.AFP