Luego de 32 meses desde que Ecuador rompió las relaciones con Colombia, poco a poco los lazos tienden a normalizarse. Por un lado, Quito ha eliminado la confrontación y, por otro, el nuevo Gobierno de Bogotá ha dado muestras de apertura al diálogo.
Esto se ha evidenciado en los recientes incidentes registrados en la frontera común. Colombia bombardeó, en el sector La Estrella (fronteriza con Sucumbíos), un campamento de las FARC y fallecieron 15 personas. Las primeras versiones señalaban que un niño ecuatoriano fue víctima del ataque. Pero ayer se confirmó que era ciudadano colombiano.
Para internacionalistas, la posición de Ecuador y de Colombia ha demostrado que los dos gobiernos están ahora en otro momento. Más comunicación y apertura han sido la clave para avanzar en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.
Asimismo, para el ex embajador de Ecuador en Bogotá, Fernando Córdova Bossano, el cambio en la postura de Quito obedece a que el Régimen “ya se está olvidando de aplicar la visión ideológica y está actuando con cierta reflexión y madurez, para preservar el interés nacional”.
Además, cree que la postura del presidente Juan Manuel Santos también ha favorecido el diálogo. “Esperemos que la posición del Primer Mandatario se confirme en el tiempo y se ratifiquen los lazos”.
Esto es compartido por la catedrática e investigadora del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Colombia, Diana Rojas. “Ya llevamos dos años en esta tentativa de reconstruir las relaciones y creo que ninguno de los gobiernos tiene la intención de dar un perfil alto a sucesos que son infortunados y se convierta en motivo de conflicto”.
Ella considera que los dos países están conscientes de los costos que ha significado para ambos la ruptura de los lazos diplomáticos.
En la misma línea está Marta Lucía Ramírez, ex ministra colombiana de la Defensa en la primera etapa del gobierno de Álvaro Uribe. A su juicio, el manejo dado al incidente en La Estrella evidencia que hay mayor comunicación entre Quito y Bogotá.
El martes, el presidente Rafael Correa aseguró que entre las 15 víctimas del ataque estaban dos ecuatorianos, por lo que pidió información a Colombia. Este tema podría ser incluido en la agenda del encuentro que hoy sostienen en Quito los cancilleres de Colombia de ambos países.
No se descarta que María Ángela Holguín entregue a su homólogo informes referentes a la identidad de los fallecidos. Esto por pedido expreso a la Cancillería colombiana, por parte del encargado de Negocios ecuatoriano en Bogotá, Andrés Terán.
“Vamos a llevar toda la información necesaria en caso de que se requiera, pero por ahora eso no entra en el tema que vamos a tratar”, dijo ayer la Ministra colombiana a la cadena RCN.
Hay otros dos incidentes que han puesto a prueba la madurez del acercamiento diplomático. El primero tiene que ver con la admisión a trámite, en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), de la demanda planteada contra Colombia por la muerte del ecuatoriano Franklin Aisalla, caído en Angostura. Ambos países han aceptado que este espinoso caso se ventile en los escenarios judiciales.
El segundo tiene que ver con la denuncia de que Colombia retomó las fumigaciones en la franja de 10 kilómetros de la frontera común. Fue una queja de las comunidades indígenas y campesinas de un corredor fronterizo en el departamento sureño del Putumayo, pero la Cancillería en Quito evitó hacer comentarios.
La Comisión se reúne a las 10:00
Hoy, en Quito se reúnen de nuevo los cancilleres de Ecuador, Ricardo Patiño, y de Colombia, María Ángela Holguín, para allanar el camino hacia el restablecimiento pleno de las relaciones diplomáticas, un proceso que se espera que culmine antes de finales de este año.
Ambos ministros encabezarán la III Reunión de la Comisión de Consideraciones Sensibles Ecuador-Colombia. Esta instancia fue creada el 24 de septiembre del año pasado, para superar los desencuentros surgidos entre los dos Estados tras la incursión militar colombiana en Angostura.
Uno de los temas complejos se refiere al pedido del Gobierno ecuatoriano a Colombia para que entregue la información de las ‘laptops’ de Raúl Reyes.
Holguín arriba a Quito a las 08:30, en compañía del titular de la Cartera de Defensa, Rodrigo Rivera, un funcionario que se ha ganado muchos bonos en este país como consecuencia de los golpes dados a las FARC.
El Ministro colombiano se entrevistará por separado con su par ecuatoriano, Javier Ponce, y con el ministro de Coordinación de Seguridad, Miguel Carvajal. Allí se tratarán los temas inherentes a la seguridad fronteriza.
Desde las 09:00, los cancilleres abordarán, a puerta cerrada, de los temas sensibles existentes alrededor del ataque a Angostura; y los proyectos de energía geotérmica en la zona fronteriza, y de desarrollo social.
A continuación, se reunirá la Comisión de Asuntos Sensibles. Está previsto que el encuentro termine a las 14:30.
Posteriormente, los cancilleres de los dos países darán una rueda de prensa para informar sobre los resultados de la cita bilateral. La meta será allanar el camino para la designación de embajadores.
Esto se ha evidenciado en los recientes incidentes registrados en la frontera común. Colombia bombardeó, en el sector La Estrella (fronteriza con Sucumbíos), un campamento de las FARC y fallecieron 15 personas. Las primeras versiones señalaban que un niño ecuatoriano fue víctima del ataque. Pero ayer se confirmó que era ciudadano colombiano.
Para internacionalistas, la posición de Ecuador y de Colombia ha demostrado que los dos gobiernos están ahora en otro momento. Más comunicación y apertura han sido la clave para avanzar en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas.
Asimismo, para el ex embajador de Ecuador en Bogotá, Fernando Córdova Bossano, el cambio en la postura de Quito obedece a que el Régimen “ya se está olvidando de aplicar la visión ideológica y está actuando con cierta reflexión y madurez, para preservar el interés nacional”.
Además, cree que la postura del presidente Juan Manuel Santos también ha favorecido el diálogo. “Esperemos que la posición del Primer Mandatario se confirme en el tiempo y se ratifiquen los lazos”.
Esto es compartido por la catedrática e investigadora del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Colombia, Diana Rojas. “Ya llevamos dos años en esta tentativa de reconstruir las relaciones y creo que ninguno de los gobiernos tiene la intención de dar un perfil alto a sucesos que son infortunados y se convierta en motivo de conflicto”.
Ella considera que los dos países están conscientes de los costos que ha significado para ambos la ruptura de los lazos diplomáticos.
En la misma línea está Marta Lucía Ramírez, ex ministra colombiana de la Defensa en la primera etapa del gobierno de Álvaro Uribe. A su juicio, el manejo dado al incidente en La Estrella evidencia que hay mayor comunicación entre Quito y Bogotá.
El martes, el presidente Rafael Correa aseguró que entre las 15 víctimas del ataque estaban dos ecuatorianos, por lo que pidió información a Colombia. Este tema podría ser incluido en la agenda del encuentro que hoy sostienen en Quito los cancilleres de Colombia de ambos países.
No se descarta que María Ángela Holguín entregue a su homólogo informes referentes a la identidad de los fallecidos. Esto por pedido expreso a la Cancillería colombiana, por parte del encargado de Negocios ecuatoriano en Bogotá, Andrés Terán.
“Vamos a llevar toda la información necesaria en caso de que se requiera, pero por ahora eso no entra en el tema que vamos a tratar”, dijo ayer la Ministra colombiana a la cadena RCN.
Hay otros dos incidentes que han puesto a prueba la madurez del acercamiento diplomático. El primero tiene que ver con la admisión a trámite, en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), de la demanda planteada contra Colombia por la muerte del ecuatoriano Franklin Aisalla, caído en Angostura. Ambos países han aceptado que este espinoso caso se ventile en los escenarios judiciales.
El segundo tiene que ver con la denuncia de que Colombia retomó las fumigaciones en la franja de 10 kilómetros de la frontera común. Fue una queja de las comunidades indígenas y campesinas de un corredor fronterizo en el departamento sureño del Putumayo, pero la Cancillería en Quito evitó hacer comentarios.
La Comisión se reúne a las 10:00
Hoy, en Quito se reúnen de nuevo los cancilleres de Ecuador, Ricardo Patiño, y de Colombia, María Ángela Holguín, para allanar el camino hacia el restablecimiento pleno de las relaciones diplomáticas, un proceso que se espera que culmine antes de finales de este año.
Ambos ministros encabezarán la III Reunión de la Comisión de Consideraciones Sensibles Ecuador-Colombia. Esta instancia fue creada el 24 de septiembre del año pasado, para superar los desencuentros surgidos entre los dos Estados tras la incursión militar colombiana en Angostura.
Uno de los temas complejos se refiere al pedido del Gobierno ecuatoriano a Colombia para que entregue la información de las ‘laptops’ de Raúl Reyes.
Holguín arriba a Quito a las 08:30, en compañía del titular de la Cartera de Defensa, Rodrigo Rivera, un funcionario que se ha ganado muchos bonos en este país como consecuencia de los golpes dados a las FARC.
El Ministro colombiano se entrevistará por separado con su par ecuatoriano, Javier Ponce, y con el ministro de Coordinación de Seguridad, Miguel Carvajal. Allí se tratarán los temas inherentes a la seguridad fronteriza.
Desde las 09:00, los cancilleres abordarán, a puerta cerrada, de los temas sensibles existentes alrededor del ataque a Angostura; y los proyectos de energía geotérmica en la zona fronteriza, y de desarrollo social.
A continuación, se reunirá la Comisión de Asuntos Sensibles. Está previsto que el encuentro termine a las 14:30.
Posteriormente, los cancilleres de los dos países darán una rueda de prensa para informar sobre los resultados de la cita bilateral. La meta será allanar el camino para la designación de embajadores.