Los pequeños y medianos agricultores que por años han soportado pérdidas a causa de las plagas y de los efectos del mal clima, ahora podrán beneficiarse de un subsidio estatal. El seguro agrícola está en vigencia y ofrece proteger los cultivos del 68% de productores.
Esa es la proyección que calcula María Reinela Tepu, coordinadora del proyecto que es dirigido por el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), que para este año ha destinado 2,7 millones de dólares.
“Este seguro evitará que los agricultores pierdan sus plantaciones, queden endeudados y tengan que migrar a las grandes ciudades. Queremos garantizar además la continuidad de la producción de los alimentos que son de primera necesidad”, señala Tepu.
La prima, que en un 60% será subsidiada por el Estado, está dirigida a productores que tengan de 1 a 30 hectáreas de cualquiera de estos 4 tipos de cultivos: en la Costa, con el arroz y el maíz duro; y en la Sierra, con la papa y el trigo.
Según la coordinadora, “el beneficio solo servirá para cubrir los costos de producción; es decir, desde que se siembra hasta que se está a punto de cosechar”, indica.
La idea levanta expectativa. Evaristo Baque, director ejecutivo de la Cámara de la II Zona de Agricultura, asegura que el proyecto es una buena iniciativa, sobre todo porque se ha tomado en cuenta a los productos que son más vulnerables a riesgos. “Cuando se logra una conquista, siempre hay un principio. Es preferible que el agricultor cuente con un rubro económico que sea seguro para poder defenderse”, sostuvo.
Según Baque la entrega de un seguro agrícola, solo en la Cámara, podría beneficiar a parte de los 55 mil agricultores que están agremiados a ella. “Allí el 70% son pequeños agricultores, cada uno de ellos tiene un máximo de 10 hectáreas”, detalló.
Francisco Barzola, dueño de 12 hectáreas de arroz en Daule, asegura que la ayuda que prestará el Gobierno podría ser una alternativa frente al mal servicio de seguros que ofrecen instituciones privadas.
“Durante años, las únicas beneficiadas siempre han sido las aseguradoras porque ofrecen cubrir en época en que no hay pérdidas. Es necesario que se lo entregue en invierno debido a las lluvias y no solo en verano”, recalcó.
Según Tepu, el seguro, que podrá ser canalizado a través del Banco Nacional de Fomento (BNF) o la aseguradora Colonial, cubrirá pérdidas totales (si es más de un 85% de la producción) o parciales (no más del 85%).
El beneficio se entrega desde mayo y hasta la fecha se han emitido 11.086 pólizas. Para el 2011 se espera expandir su cobertura y ayudar a otros campesinos que cultivan la caña de azúcar, el banano, la soya, al sector ganadero y al pesquero.
Esa es la proyección que calcula María Reinela Tepu, coordinadora del proyecto que es dirigido por el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), que para este año ha destinado 2,7 millones de dólares.
“Este seguro evitará que los agricultores pierdan sus plantaciones, queden endeudados y tengan que migrar a las grandes ciudades. Queremos garantizar además la continuidad de la producción de los alimentos que son de primera necesidad”, señala Tepu.
La prima, que en un 60% será subsidiada por el Estado, está dirigida a productores que tengan de 1 a 30 hectáreas de cualquiera de estos 4 tipos de cultivos: en la Costa, con el arroz y el maíz duro; y en la Sierra, con la papa y el trigo.
Según la coordinadora, “el beneficio solo servirá para cubrir los costos de producción; es decir, desde que se siembra hasta que se está a punto de cosechar”, indica.
La idea levanta expectativa. Evaristo Baque, director ejecutivo de la Cámara de la II Zona de Agricultura, asegura que el proyecto es una buena iniciativa, sobre todo porque se ha tomado en cuenta a los productos que son más vulnerables a riesgos. “Cuando se logra una conquista, siempre hay un principio. Es preferible que el agricultor cuente con un rubro económico que sea seguro para poder defenderse”, sostuvo.
Según Baque la entrega de un seguro agrícola, solo en la Cámara, podría beneficiar a parte de los 55 mil agricultores que están agremiados a ella. “Allí el 70% son pequeños agricultores, cada uno de ellos tiene un máximo de 10 hectáreas”, detalló.
Francisco Barzola, dueño de 12 hectáreas de arroz en Daule, asegura que la ayuda que prestará el Gobierno podría ser una alternativa frente al mal servicio de seguros que ofrecen instituciones privadas.
“Durante años, las únicas beneficiadas siempre han sido las aseguradoras porque ofrecen cubrir en época en que no hay pérdidas. Es necesario que se lo entregue en invierno debido a las lluvias y no solo en verano”, recalcó.
Según Tepu, el seguro, que podrá ser canalizado a través del Banco Nacional de Fomento (BNF) o la aseguradora Colonial, cubrirá pérdidas totales (si es más de un 85% de la producción) o parciales (no más del 85%).
El beneficio se entrega desde mayo y hasta la fecha se han emitido 11.086 pólizas. Para el 2011 se espera expandir su cobertura y ayudar a otros campesinos que cultivan la caña de azúcar, el banano, la soya, al sector ganadero y al pesquero.
