jueves, 18 de noviembre de 2010

Las técnicas de investigación, otro vacío de la Ley de Lavado

Pese a los pedidos de organismos de control como la Policía y la Fiscalía, el proyecto de Ley de Prevención y Detección del Lavado de Activos y del Financiamiento de Delitos, no abordó un aspecto medular en la lucha contra este delito: las técnicas especiales de investigación.

Ese proyecto, aprobado el 5 de noviembre, pasó a la Presidencia de la República que tiene un mes para analizarlo, antes de su aprobación o veto, parcial o total.

Este Diario entrevistó a varios expertos en la lucha contra el lavado de activos, quienes coincidieron en que el proyecto tiene un gran vacío al no facilitar a los investigadores técnicas que les permitan profundizar sus seguimientos y golpear al corazón del crimen organizado.

El director de Investigaciones de la Fiscalía, José Cisneros, apunta ese vacío. Destaca que la norma aprobada en la Asamblea no acogió los pedidos de que la Policía y la Fiscalía en sus investigaciones trabajen; por ejemplo, con testigos encubiertos, puedan pagar informantes. Además, posibilitar la entrega vigilada de dinero, descubierto a mulas que ingresan con recursos económicos, para el blanqueo de fondos.

A través de la entrega vigilada, los agentes podrían negociar con la persona que ingresa con dinero en efectivo, no declarado, para reducirle la pena que se lo podría imponer por lavado de activos, comenta Cisneros.

Los dos últimos años, en los aeropuertos de Quito y Guayaquil han sido detenidas 96 mulas con dinero en efectivo. Los agentes estiman que, por cada detenido, cinco más evaden los controles. Desde el 2008 estas personas han sido detenidas con cerca de USD 13 millones, que no incluyeron en su declaración de aduanas.

Un agente estadounidense que trabaja con funcionarios de las Aduanas y la Fiscalía señala esa como una gran debilidad para la lucha antidelictiva.

“En EE.UU. las operaciones encubiertas y las entregas controladas de dinero generan un 50% de nuestros casos y el 90% se inician por compra de información. Son técnicas básicas no son sofisticadas. Actualmente la mayoría de casos no llegan al fondo, a las cabezas de las organizaciones criminales ni a todos sus colaboradores”, comenta el investigador.

Un policía ecuatoriano que trabaja en la lucha antilavado, además, destaca que las unidades especializadas no cuentan con bases de datos para acceder a información clave de otros organismos de control. “Todo el procedimiento se hace a través de la Fiscalía lo cual dilata nuestras operaciones”.