Mario Avilés Sánchez
Una cuadrilla de diez hombres, apoyada por retroexcavadoras, motoniveladoras, rodillos y volquetes, realizaba el pasado martes 9 de noviembre los trabajos preliminares para la ampliación de la vía San Mateo-San Lorenzo, a la altura de Camarones, a unos 30 kilómetros del cantón Esmeraldas.
Ese tramo es parte de una autopista de 424 kilómetros que parte de la provincia de Imbabura, recorre la zona costera de Esmeraldas y termina en Manabí.
La rehabilitación y mantenimiento de esa vía, que integra la llamada Ruta del Spondylus, está a cargo de la compañía Técnica General de Construcciones (TGC), que fue contratada por el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) el 28 de agosto de 2008.
Esa cartera, que desde el inicio había asumido la fiscalización del proyecto vial, contrató, el pasado 5 de octubre, a la compañía Inextec para esa tarea, cuando los trabajos a ese mes registraban un avance físico del 87,94%.
La misma decisión fue tomada para otros nueve proyectos que se desarrollan en el país, en los cuales la labor fiscalizadora estaba en manos del MTOP. Con ese fin, entre junio y octubre de este año, dicha entidad adjudicó a empresas privadas los contratos correspondientes por un total de 6’430.650 dólares (ver gráfico).
Las nuevas contrataciones
Los procesos de contratación, convocados y publicados en el Portal de Compras Públicas, fueron para 13 obras (nueve pertenecen al denominado Plan Relámpago). Tres fueron declarados desiertos (rehabilitación de las vías Calceta-Tosagua, en Manabí; Riobamba-Macas, tramo Cebadas- 9 de Octubre, que comparten Chimborazo y Morona Santiago; y Mitad del Mundo-La Independencia, en Pichincha).
Otro (reconstrucción de la vía Santo Domingo-Nuevo Israel-Los Naranjos-Puerto Limón-Luz de América, en Santo Domingo de los Tsáchilas), está a la espera de un acuerdo de negociación.
Cuatro de los proyectos con reciente contratación, muestran a octubre -según reportes del MTOP- avances de obra que sobrepasan el 60%.
Estos son: el relleno hidráulico de Babahoyo (Los Ríos), la construcción del centro binacional de atención fronteriza -concluido- (El Oro) y la rehabilitación de las carreteras Y de Tababuela-San Lorenzo-Esmeraldas-Pedernales (Imbabura, Esmeraldas y Manabí), y Santa Elena-Bahía de Caráquez (Santa Elena y Manabí).
Fernando Zambrano, subsecretario regional del MTOP en Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas, justifica las recientes contrataciones por motivos de logística. Esa jurisdicción del organismo tenía a su cargo el control de dos de los proyectos viales en cuestión.
“Aquí en la Dirección Provincial tenemos un solo profesional para fiscalizar, y en el momento de hacer chequeos técnicos y ensayos se complica un poco. Las fiscalizaciones que se contratan ya vienen con todo el equipo de apoyo para hacer todo lo que corresponde a control de calidad”, explica.
La Ley Orgánica del Sistema de Contratación Pública permite que las entidades estatales por administración directa ejerzan la fiscalización de obras contratadas. Expertos consultados por este Diario opinan que es recomendable que el MTOP contrate una consultoría particular y cumpla más bien una función de supervisión.
Rafael Estrada Velásquez, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Guayas, afirma que un alto número de obras del Plan Relámpago ha incrementado sus montos por fallas de diseño. “Es preocupante que a estas alturas llamen a la empresa privada para tratar de legalizar todo y cubrir ciertas deficiencias”.