La empresa estatal petrolera ecuatoriana, Petroecuador, informó hoy de que el horizonte para la producción petrolera del país, que hasta ahora se fijaba en 2028, se extendería hasta 2043.
Así lo señaló Pablo Caicedo, jefe del Consejo de Administración de Petroecuador, quien dijo que con nuevos estudios efectuados sobre las posibilidades de extracción de crudo la producción petrolera nacional se extenderá entre 35 y 40 años más.
"El futuro petrolero ecuatoriano recae en las reservas de los campos conocidos sin explotar, estos están en manos del Estado, en Petroproducción, que posee el 91% de ellos; mientras que el remanente, que tienen las empresas privadas, no llega al nueve por ciento", indicó Caicedo.
Según un estudio de la consultora internacional Wood MacKenzie, contratada por la estatal, la extracción de crudo en los campos que actualmente se encuentran en funcionamiento podría ir hasta el año 2028, pero el periodo podría alargarse hasta el 2043 con la puesta en operación de nuevos yacimientos aún no explotados.
Como ejemplo, Caicedo, durante un seminario con expertos noruegos, que se efectúa en Quito, indicó que "la explotación en el litoral permitiría incorporar 110 000 barriles de petróleo para el 2022 en adelante".
Recordó que en la actualidad el grueso de la explotación petrolera se concentra en la Amazonía ecuatoriana, sobre todo en las provincias de Sucumbíos y Orellana, pero que se han hecho estudios en la zona costera y en la plataforma marina que podrían contribuir a extender el futuro petrolero del país.
Además, hizo una cronología sobre la historia petrolera de Ecuador, en la que destacó periodos de aumento de la producción y otros de disminución, por la falta de inversiones estatales en el sector.
"De 328 000 barriles que producía en la década de los años70, en junio de 2008 el registro baja a 153 000 barriles; es decir, la producción decae en un 50%", sobre todo por la privatización de varios campos que pertenecían entonces a Petroecuador.
Asimismo, destacó que la bajada de producción en esa época obedeció a la "fuga de talento humano" de Petroecuador hacia empresas privadas y la falta de capacidad administrativa para ejecutar los presupuestos de la empresa.
Actualmente, añadió Caicedo, Ecuador no posee "la capacidad para refinar petróleo y producir derivados;diesel, gasolinas, naftas, gas licuado, su importación representa aproximadamente tres mil millones de dólares anuales y los subsidios, cerca de dos mil millones y medio de dólares al año".
Esa realidad perjudica al rubro de ingresos por las exportaciones petroleras, aunque el Gobierno ecuatoriano proyecta construir en una zona costera del país, mediante una alianza con la venezolana PDVSA, un gran complejo petroquímico, que permitiría suplir el déficit interno y proyectar exportaciones de derivados.
Petroecuador también basa sus proyecciones en los análisis de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y la Agencia Internacional de Energía (AIE), que coinciden en que en los próximos 30 años no habrá cambios drásticos en el consumo de energía, producida por hidrocarburos. (EFE)
Así lo señaló Pablo Caicedo, jefe del Consejo de Administración de Petroecuador, quien dijo que con nuevos estudios efectuados sobre las posibilidades de extracción de crudo la producción petrolera nacional se extenderá entre 35 y 40 años más.
"El futuro petrolero ecuatoriano recae en las reservas de los campos conocidos sin explotar, estos están en manos del Estado, en Petroproducción, que posee el 91% de ellos; mientras que el remanente, que tienen las empresas privadas, no llega al nueve por ciento", indicó Caicedo.
Según un estudio de la consultora internacional Wood MacKenzie, contratada por la estatal, la extracción de crudo en los campos que actualmente se encuentran en funcionamiento podría ir hasta el año 2028, pero el periodo podría alargarse hasta el 2043 con la puesta en operación de nuevos yacimientos aún no explotados.
Como ejemplo, Caicedo, durante un seminario con expertos noruegos, que se efectúa en Quito, indicó que "la explotación en el litoral permitiría incorporar 110 000 barriles de petróleo para el 2022 en adelante".
Recordó que en la actualidad el grueso de la explotación petrolera se concentra en la Amazonía ecuatoriana, sobre todo en las provincias de Sucumbíos y Orellana, pero que se han hecho estudios en la zona costera y en la plataforma marina que podrían contribuir a extender el futuro petrolero del país.
Además, hizo una cronología sobre la historia petrolera de Ecuador, en la que destacó periodos de aumento de la producción y otros de disminución, por la falta de inversiones estatales en el sector.
"De 328 000 barriles que producía en la década de los años70, en junio de 2008 el registro baja a 153 000 barriles; es decir, la producción decae en un 50%", sobre todo por la privatización de varios campos que pertenecían entonces a Petroecuador.
Asimismo, destacó que la bajada de producción en esa época obedeció a la "fuga de talento humano" de Petroecuador hacia empresas privadas y la falta de capacidad administrativa para ejecutar los presupuestos de la empresa.
Actualmente, añadió Caicedo, Ecuador no posee "la capacidad para refinar petróleo y producir derivados;diesel, gasolinas, naftas, gas licuado, su importación representa aproximadamente tres mil millones de dólares anuales y los subsidios, cerca de dos mil millones y medio de dólares al año".
Esa realidad perjudica al rubro de ingresos por las exportaciones petroleras, aunque el Gobierno ecuatoriano proyecta construir en una zona costera del país, mediante una alianza con la venezolana PDVSA, un gran complejo petroquímico, que permitiría suplir el déficit interno y proyectar exportaciones de derivados.
Petroecuador también basa sus proyecciones en los análisis de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y la Agencia Internacional de Energía (AIE), que coinciden en que en los próximos 30 años no habrá cambios drásticos en el consumo de energía, producida por hidrocarburos. (EFE)