lunes, 7 de septiembre de 2009

Presidente Correa anuncia reversión de concesiones a camaroneras

El presidente de la República, Rafael Correa, dio a conocer que el Estado ecuatoriano revertirá algunas de las concesiones camaroneras de la isla Puná, debido a que muchas de las compañías evaden impuestos y no ha afiliado a sus trabajadores al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).

El presidente Correa dijo que “el Estado revierta las concesiones para empresas que son propiedades de empresas fantasmas en paraísos fiscales, segundo, las camaroneras que ni siquiera han estado regularizadas, que se instalaron después del 99, cuando se había prohibido la implantación de camaroneras, que son 4 en Puná, directamente se las vamos a pasar a los puneños, esta tierra es nuestra”.

Ante ello, manifestó que con la Cartera de Estado encargada del tema se elaborará un acuerdo ministerial para que se puedan revertir las concesiones, “es perfectamente legal, concesión viene de conceder, estamos concediendo el para que funcionen, han hecho todo mal, se lo quitamos y se los vamos a pasar a los puneños”

Al tiempo de indicar que, “y si en el término de algunos meses, hasta marzo del 2010, no se me regularizan el resto de camaroneras, no afilian a sus trabajadores al IESS, no pagan adecuados tributos también se las mando esas camaroneras a los puneños, se acabó la fiesta”.

“De ahora en adelante, cuando el Estado conceda algo que es de todos los ecuatorianos, la concesión va a ser para los pobres, es que los pobres no tienen una capacidad para poner una camaronera, no tiene capital, perfecto, concesión con condición, ustedes X, Y, Z, ¿quiere poner la camaronera?, si, en alianza con la comunidad, con trabajadores de la comunidad y con capacitación para la comunidad, para que en ocho o diez años, la comunidad se pueda hacer cargo directamente de la camaronera”, agregó.

Cambio en pesca

“No somos sectarios ni excluyentes, pero nuestra opción preferencial siempre serán los pobres”, comenzó diciendo el Mandatario para anunciar que paulatinamente se irá reduciendo la actividad de pesca de arrastre, para fomentar la pesca artesanal.

“Los grandes barcos pesqueros no son de los pobres”, agregó el Presidente, al tiempo de anotar que esto es parte de la radicalización de la revolución ciudadana.