El Estado ecuatoriano recibe 8,44 dólares adicionales por cada barril de crudo Oriente y 11,11 dólares por cada barril de crudo Napo que vende en el mercado internacional, debido a la reducción del diferencial sucedido entre enero y junio.
En enero de este año, el diferencial para el crudo Oriente era de 13,59 dólares, mientras que a junio bajó a 5,10 dólares. En el caso del crudo Napo, el diferencial en el primer mes del año era de 19,55 dólares, que a junio se redujo a 8,44 dólares.
La disminución se dio pese a que el crudo marcador West Texas Intermediate (WTI) aumentó su precio en aproximadamente 50%, al pasar de 40 a 60 dólares el barril durante el semestre. En este tiempo el diferencial se redujo en un 60%, mejorando significativamente los ingresos para el Estado ecuatoriano.
“La política comercial que ha llevado adelante el Estado ha permitido que efectivamente tengamos una tendencia a que el diferencial se mantenga bajo, lo cual deja millones de dólares en beneficio del Estado”, dijo el ministro de Minas y Petróleos, Germánico Pinto Troya.
La reducción del diferencial se logró gracias a las acciones llevadas a cabo por Petroecuador, que puso en práctica la venta de crudo a consumidores finales; las ventas a largo plazo, y el permanente envío de información oficial de la estatal petrolera a las revistas especializadas Argus y Platt´s.
Este diferencial también se aplicará en las ventas de crudo ecuatoriano a la empresa estatal Petrochina, contrato en el cual el diferencial será el promedio de las últimas diez cotizaciones publicadas por Argus y Platt´s del mes en que se realiza el embarque.
El ministro Pinto indicó que el Gobierno tiene una política comercial definida, “no desarticulada como en anteriores regímenes, en los cuales se veía un diferencial alto. La política es adecuada, soberana. Se privilegia la venta de crudo a consumidores finales”, manifestó.
El comportamiento del diferencial, mal denominado castigo, obedece a diversas causas intrínsecas del mercado, como la calidad del producto frente a las características del crudo marcador (en el caso ecuatoriano, el WTI).
Otras causas están relacionadas con el costo del flete, la competencia en el mercado y el manejo de la información en las revistas especializadas
En enero de este año, el diferencial para el crudo Oriente era de 13,59 dólares, mientras que a junio bajó a 5,10 dólares. En el caso del crudo Napo, el diferencial en el primer mes del año era de 19,55 dólares, que a junio se redujo a 8,44 dólares.
La disminución se dio pese a que el crudo marcador West Texas Intermediate (WTI) aumentó su precio en aproximadamente 50%, al pasar de 40 a 60 dólares el barril durante el semestre. En este tiempo el diferencial se redujo en un 60%, mejorando significativamente los ingresos para el Estado ecuatoriano.
“La política comercial que ha llevado adelante el Estado ha permitido que efectivamente tengamos una tendencia a que el diferencial se mantenga bajo, lo cual deja millones de dólares en beneficio del Estado”, dijo el ministro de Minas y Petróleos, Germánico Pinto Troya.
La reducción del diferencial se logró gracias a las acciones llevadas a cabo por Petroecuador, que puso en práctica la venta de crudo a consumidores finales; las ventas a largo plazo, y el permanente envío de información oficial de la estatal petrolera a las revistas especializadas Argus y Platt´s.
Este diferencial también se aplicará en las ventas de crudo ecuatoriano a la empresa estatal Petrochina, contrato en el cual el diferencial será el promedio de las últimas diez cotizaciones publicadas por Argus y Platt´s del mes en que se realiza el embarque.
El ministro Pinto indicó que el Gobierno tiene una política comercial definida, “no desarticulada como en anteriores regímenes, en los cuales se veía un diferencial alto. La política es adecuada, soberana. Se privilegia la venta de crudo a consumidores finales”, manifestó.
El comportamiento del diferencial, mal denominado castigo, obedece a diversas causas intrínsecas del mercado, como la calidad del producto frente a las características del crudo marcador (en el caso ecuatoriano, el WTI).
Otras causas están relacionadas con el costo del flete, la competencia en el mercado y el manejo de la información en las revistas especializadas