Tras 28 días de agonía a causa de la gripe AH1N1, a las 20:10 de ayer finalmente murió en el Hospital Militar de Quito John Merino, jefe de Seguridad del Palacio de Gobierno. El mandatario se solidarizó con los deudos.
John Bolívar Merino Barreiro, jefe de seguridad de la Presidencia de la República, falleció ayer a consecuencia de la gripe AH1N1, tras 28 días de estar internado en cuidados intensivos del Hospital Militar de Quito.
El oficial fue ingresado a las 11:00 del 10 de agosto pasdo con pronóstico grave, después de que coordinara las tareas de seguridad de la cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), los festejos por el Bicentenario de la Independencia y la investidura de Rafael Correa en su segundo mandato consecutivo, que se celebraron ese día.
El oficial de la Fuerza Aérea no le prestó atención a la fiebre alta, dolor del cuerpo, tos y otros síntomas. Según sus compañeros, ocultó su malestar hasta que la enfermedad pudo más que su voluntad de cumplir su deber.
"Mi jefe de seguridad, un extraordinario oficial, está entre la vida y la muerte por cumplir más allá del deber, con imprudencia incluso", dijo esa ocasión Rafael Correa, pues Merino no reportó que tenía síntomas de gripe y siguió laborando.
El teniente coronel Merino, de 45 años de edad, murió a las 20:10 de ayer, víctima de un paro cardio respiratorio, dijo Luis Remache, médico del área de cuidados intensivos del Hospital Militar, así como Francisco Torres, médico de el Palacio de Gobierno.
Esto ocurre luego de que el director médico de esa casa de salud, Mariano Granja, confirmó ayer en la tarde que Merino se hallaba "en estado extremadamente crítico, en proceso terminal. Estamos haciendo todos los esfuerzos pero en las últimas 48 horas la respuesta ha sido nula y hay pocas posibilidades de vida".
Tras conocer el hecho, pasadas las 21:00, Correa acudió al Hospital Militar a dar el pésame a los familiares, a quienes les señaló que el jefe de seguridad fue "un hombre de trabajo incansable".
A las 23:15, el féretro con el cuerpo del oficial fue embarcado en una carroza y en compañía de un vehículo militar fue conducido al Salón Amarillo del Palacio de Carondelet, donde se instaló una capilla ardiente para velarlo toda la noche. Hoy será llevado a Guayaquil para ser sepultado el miércoles, según fuentes oficiales.
Hasta que sea nombrado el reemplazo de Merino, interinamente ocupa su cargo el mayor Marco Montenegro.
John Bolívar Merino Barreiro, jefe de seguridad de la Presidencia de la República, falleció ayer a consecuencia de la gripe AH1N1, tras 28 días de estar internado en cuidados intensivos del Hospital Militar de Quito.
El oficial fue ingresado a las 11:00 del 10 de agosto pasdo con pronóstico grave, después de que coordinara las tareas de seguridad de la cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), los festejos por el Bicentenario de la Independencia y la investidura de Rafael Correa en su segundo mandato consecutivo, que se celebraron ese día.
El oficial de la Fuerza Aérea no le prestó atención a la fiebre alta, dolor del cuerpo, tos y otros síntomas. Según sus compañeros, ocultó su malestar hasta que la enfermedad pudo más que su voluntad de cumplir su deber.
"Mi jefe de seguridad, un extraordinario oficial, está entre la vida y la muerte por cumplir más allá del deber, con imprudencia incluso", dijo esa ocasión Rafael Correa, pues Merino no reportó que tenía síntomas de gripe y siguió laborando.
El teniente coronel Merino, de 45 años de edad, murió a las 20:10 de ayer, víctima de un paro cardio respiratorio, dijo Luis Remache, médico del área de cuidados intensivos del Hospital Militar, así como Francisco Torres, médico de el Palacio de Gobierno.
Esto ocurre luego de que el director médico de esa casa de salud, Mariano Granja, confirmó ayer en la tarde que Merino se hallaba "en estado extremadamente crítico, en proceso terminal. Estamos haciendo todos los esfuerzos pero en las últimas 48 horas la respuesta ha sido nula y hay pocas posibilidades de vida".
Tras conocer el hecho, pasadas las 21:00, Correa acudió al Hospital Militar a dar el pésame a los familiares, a quienes les señaló que el jefe de seguridad fue "un hombre de trabajo incansable".
A las 23:15, el féretro con el cuerpo del oficial fue embarcado en una carroza y en compañía de un vehículo militar fue conducido al Salón Amarillo del Palacio de Carondelet, donde se instaló una capilla ardiente para velarlo toda la noche. Hoy será llevado a Guayaquil para ser sepultado el miércoles, según fuentes oficiales.
Hasta que sea nombrado el reemplazo de Merino, interinamente ocupa su cargo el mayor Marco Montenegro.