lunes, 21 de septiembre de 2009

Colombia quiere romper unidad de Venezuela y Ecuador

Venezuela y Ecuador tienen “claridad” sobre la nueva estrategia que está desarrollando Colombia para romper el nivel de entendimiento entre ambos países, indicó el ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro.

“Conversamos de eso con el canciller Fander Falconí y hay mucha claridad en ambos Gobiernos sobre ese juego”, dijo Maduro en una entrevista con el ex vicepresidente y ex canciller José Vicente Rangel difundida ayer por el canal privado Televén.

El “juego” colombiano consiste, según lo expresado en la entrevista, en minimizar las tensiones con Ecuador y volcar el esfuerzo beligerante hacia Venezuela, con ataques al presidente Hugo Chávez.

Esas diatribas buscan relanzar y consolidar la matriz de opinión de que Chávez apoya a la guerrilla colombiana y le proporciona armas.

Ante la amenaza
Maduro señaló que uno de los objetivos de esa estrategia, además de crear desacuerdos con Ecuador, es minimizar la “amenaza” que representan para Suramérica las siete bases que acogerán a tropas estadounidenses en Colombia.

El canciller venezolano manifestó que, sin embargo, “eso no va a desviar la exigencia de Suramérica para que Colombia presente garantías sobre el uso de las bases y para aumentar la conciencia sobre la amenaza que representan”.

Alarma regional
La garantía sobre el uso exigiría que “no se utilicen para espiar, la guerra electrónica y la movilización de tropas a otras zonas, pero Colombia dijo que no podía entregar esas garantías, y eso aumento la alarma en la región”.

Maduro recordó que inicialmente Bogotá negó que se tratara de bases militares o que fueran a albergar tropas extranjeras hasta el punto de que el Gobierno venezolano las llamó “parques infantiles”.

Pero luego, añadió Maduro, se ha comprobado que no solo son militares y para uso de fuerzas extranjeras sino que su control escapa de las autoridades colombianas. “La mentira que trataron de vender se diluyó”, indicó.

“Después de la reunión de Quito quedó claro que Colombia no tiene el control y su propio canciller (Jaime Bermúdez) dijo que no podía facilitar el acuerdo con Estados Unidos porque no tenía permiso de Washington”, argumentó el ministro Maduro.

El compromiso de Uribe. El canciller Nicolás Maduro sostuvo que el acuerdo de la bases ha torpedeado las excelentes relaciones, sobre todo económicas, que se habían levantado entre Bogotá y Caracas durante los últimos seis años y dijo que detrás de ese revés debe haber un compromiso “muy grande”.

“El compromiso que (Álvaro) Uribe debe tener con los sectores más reaccionarios y guerreristas del Pentágono debe ser muy grande para desechar una relación privilegiada con Venezuela, cuyas compras a Colombia superaron los 7.000 millones de dólares”, expresó el canciller.

Maduro explicó que en el fondo “se trata de recomponer el poder imperial en la región para recuperar la dominación política y económica en base a la supremacía militar y tecnológica”. EFE