El Procurador General del Estado, Diego García Carrión enfrenta ahora un nuevo problema con el tema de los “bonos espirituales”, que por un monto de $ 10 millones, fueron regalados a los empleados de esa institución. El presidente de los servidores, Xavier Vélez se ha negado a entregar los valores que les fueron descontados a los burócratas, desconociendo un acuerdo firmado en ese sentido, por lo que se ha iniciado un proceso por peculado ante la justicia de Ecuador.
El hecho se dio el año pasado, el 25 de Julio de 2008, tras una serie de once peticiones efectuadas por el anterior presidente de la Asociación de Servidores de la Procuraduría General del Estado, José Saúd Sacoto se lograron un aporte sin ningún justificativo para los empleados por parte del entonces Procurador, Xavier Garaicoa, por $11 millones de dólares.
Ese día, el actual presidente de la entidad gremial, Xavier Vélez procedió a distribuir el valor de US$ 10 Millones entre todos los empleados de la institución, aduciendo que serán destinados al desarrollo “espiritual” de todos, pese a que esos dineros estaban siendo motivo de un examen especial de la Contraloría del Estado.
Tras el escándalo, las denuncias en la prensa y las acusaciones del Fiscal General del Estado, Washington Pesantez, se inició un proceso penal, surgió la oferta de devolución que hicieron la mayoría de los servidores, lo cual fue ratificado el 13 de febrero de 2009, mediante oficio del Vicepresidente de la ASOPGE, Rodrigo Durango Cordero.
El hecho se dio el año pasado, el 25 de Julio de 2008, tras una serie de once peticiones efectuadas por el anterior presidente de la Asociación de Servidores de la Procuraduría General del Estado, José Saúd Sacoto se lograron un aporte sin ningún justificativo para los empleados por parte del entonces Procurador, Xavier Garaicoa, por $11 millones de dólares.
Ese día, el actual presidente de la entidad gremial, Xavier Vélez procedió a distribuir el valor de US$ 10 Millones entre todos los empleados de la institución, aduciendo que serán destinados al desarrollo “espiritual” de todos, pese a que esos dineros estaban siendo motivo de un examen especial de la Contraloría del Estado.
Tras el escándalo, las denuncias en la prensa y las acusaciones del Fiscal General del Estado, Washington Pesantez, se inició un proceso penal, surgió la oferta de devolución que hicieron la mayoría de los servidores, lo cual fue ratificado el 13 de febrero de 2009, mediante oficio del Vicepresidente de la ASOPGE, Rodrigo Durango Cordero.