Falconí: diálogo bilateral es 'punto de partida' para la reconciliación
Los cancilleres de Colombia y Ecuador acordaron continuar esta semana en Nueva York el diálogo bilateral como "punto de partida" tendente a la reconciliación, dijo hoy el canciller de Ecuador, Fander Falconí.
Los ministros celebraron anoche un primer encuentro, que Falconí calificó de "diálogo sustativo" para abordar los requisitos del Gobierno de Ecuador para el restablecimiento de relaciones diplomáticas.
La ruptura de esas relaciones se produjo en marzo de 2008 tras el bombardeo del Ejército colombiano a un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano, donde fallecieron 26 personas, entre ellas el jefe guerrillero "Raúl Reyes".
Ecuador consideró ese ataque una violación a su soberanía.
En su primera reunión directa, fijaron una "metodología de trabajo", en la que irán avanzando en los puntos de consenso y para los desacuerdos, no descartan la intervención mediadora de organismos como la OEA o el Centro Carter.
Sin embargo, Falconí descartó la mediación de otro país en el conflicto bilateral.
Los dos cancilleres se encuentran en Nueva York para asistir a la Asamblea General de la ONU que reúne en esta ciudad a gobernantes de 192 países para analizar conflictos internacionales, la crisis económica y el cambio climático.
Falconí dijo que la postura de Ecuador es buscar "respuestas comunes contra el cambio climático, pero diferenciadas", puesto que no tienen la misma responsabilidad los países industrializados, que son los que más contaminan, que los países en vías de desarrollo.
Señaló que su país ha planteado dejar intactas las reservas petroleras en el parque nacional de Yasuní, a cambio de compensaciones de al menos el 50%.
Respecto a la crisis hondureña, subrayó que el presidente legal es Manuel Zelaya y que es necesario preservar su integridad física y la seguridad de la embajada brasileña en Tegucigalpa, donde se encuentra refugiado desde el lunes.
El canciller ecuatoriano participó en Nueva York en sendas reuniones del grupo de Río y de la Alba, para analizar la nueva situación hondureña.
"Hay riesgos de intervención golpista", advirtió el canciller ecuatoriano.
Fander Falconí destacó el "importante proceso" integracionista en Latinoamérica que supone la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), donde, dijo, se están creando medidas de confianza mutua y generando compromisos para avanzar en proyectos concretos.
"Hay una voluntad política nueva" en avanzar hacia la integración en Latinoamérica, afirmó. (EFE)
Los ministros celebraron anoche un primer encuentro, que Falconí calificó de "diálogo sustativo" para abordar los requisitos del Gobierno de Ecuador para el restablecimiento de relaciones diplomáticas.
La ruptura de esas relaciones se produjo en marzo de 2008 tras el bombardeo del Ejército colombiano a un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano, donde fallecieron 26 personas, entre ellas el jefe guerrillero "Raúl Reyes".
Ecuador consideró ese ataque una violación a su soberanía.
En su primera reunión directa, fijaron una "metodología de trabajo", en la que irán avanzando en los puntos de consenso y para los desacuerdos, no descartan la intervención mediadora de organismos como la OEA o el Centro Carter.
Sin embargo, Falconí descartó la mediación de otro país en el conflicto bilateral.
Los dos cancilleres se encuentran en Nueva York para asistir a la Asamblea General de la ONU que reúne en esta ciudad a gobernantes de 192 países para analizar conflictos internacionales, la crisis económica y el cambio climático.
Falconí dijo que la postura de Ecuador es buscar "respuestas comunes contra el cambio climático, pero diferenciadas", puesto que no tienen la misma responsabilidad los países industrializados, que son los que más contaminan, que los países en vías de desarrollo.
Señaló que su país ha planteado dejar intactas las reservas petroleras en el parque nacional de Yasuní, a cambio de compensaciones de al menos el 50%.
Respecto a la crisis hondureña, subrayó que el presidente legal es Manuel Zelaya y que es necesario preservar su integridad física y la seguridad de la embajada brasileña en Tegucigalpa, donde se encuentra refugiado desde el lunes.
El canciller ecuatoriano participó en Nueva York en sendas reuniones del grupo de Río y de la Alba, para analizar la nueva situación hondureña.
"Hay riesgos de intervención golpista", advirtió el canciller ecuatoriano.
Fander Falconí destacó el "importante proceso" integracionista en Latinoamérica que supone la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), donde, dijo, se están creando medidas de confianza mutua y generando compromisos para avanzar en proyectos concretos.
"Hay una voluntad política nueva" en avanzar hacia la integración en Latinoamérica, afirmó. (EFE)