México, EFE. El Gobierno mexicano conoce ya las identidades de siete de los autores de la matanza de 72 inmigrantes, desveló hoy el portavoz de Seguridad, Alejandro Poiré.
En rueda de prensa, el funcionario dijo que el pasado 30 de agosto fueron hallados los cadáveres de tres hombres que posteriormente fueron identificados por uno de los supervivientes como parte del grupo que mató a los indocumentados.
A ellos hay que sumar un joven que fue detenido y tres delincuentes mas que murieron en un choque con la Marina el 24 de agosto.
"Tenemos bajo arraigo a un mexicano que fue identificado por los sobrevivientes (...), también se localizaron los cuerpos sin vida de tres hombres y dos mujeres, los hombres fueron identificados por el sobreviviente hondureño como responsables" de la matanza, dijo Poiré.
Los tres cadáveres hallados por la Marina el 30 de agosto en una carretera de Abasolo (Tamaulipas, estado del norte donde sucedió la masacre) fueron identificados por el superviviente hondureño como autores de los hechos.
El hallazgo se logró gracias a una llamada anónima que señaló a los cuerpos como correspondientes a presuntos responsables del homicidio de los inmigrantes, indicó Poiré.
La práctica de señalar la presencia de hombres armados en un lugar o indicar dónde pueden encontrarse cadáveres a través de una comunicación anónima es habitual entre los carteles de la droga para hacer daño a organizaciones rivales.
Las dos mujeres halladas muertas junto a los presuntos autores de la matanza aún no han podido ser identificadas.
Por su parte, el portavoz de la Fiscalía federal, Ricardo Nájera, dijo en el mismo acto que hasta el momento los datos apuntan a que la autoría de la matanza de los inmigrantes es del cartel de Los Zetas, como declaró el sobreviviente horas después de perpetrado el hecho, en la madrugada del pasado 22 de agosto.
Una de las hipótesis que maneja el Gobierno es que a los inmigrantes (presuntamente indocumentados) secuestrados por los narcotraficantes se les pretendía reclutar como sicarios, pero al negarse a participar como tal fueron asesinados.
Los inmigrantes asesinados provenían de Ecuador, Guatemala, El Salvador, Honduras y Brasil. Hasta el momento se ha logrado identificar a 27 cuerpos, que ya han sido repatriados a sus países de origen: 16 a Honduras y 11 a El Salvador.
Sobre la situación de los testigos Poiré abundó que el ecuatoriano ya fue enviado a su país, mientras que un ciudadano hondureño está bajo protección del Gobierno mexicano.
Aclaró que está por confirmarse si es cierta la existencia de otro superviviente salvadoreño, que se encuentra actualmente en Estados Unidos.