El Gobierno ayer realizó un desalojo de mineros ilegales en Zamora Chinchipe, con la finalidad de evitar la contaminación del medio ambiente y los ríos.Carlos Viteri, secretario ejecutivo del Instituto para el Ecodesarrollo Regional Amazónico (Ecorae), dijo que los mineros son utilizados políticamente por el prefecto de Zamora y militante de Pachakutik, Salvador Quishpe.
“Allí lo que se está planteando es un discurso de resistencia, es una posición absolutamente errada, manipulada por actores de la oposición que se encuentran en la provincia. Hablar de resistencia es resistirse al cambio”, informó el funcionario a la agencia de noticias Andes.
Viteri explicó que lo que el Gobierno busca es organizar a los mineros para que dejen la condición de ilegales y no contaminen los ríos.
Para él, en Zamora la actividad minera ilegal causa efectos devastadores al medio ambiente.
“Es paradójico porque hace unos meses el gobierno provincial de Zamora Chinchipe se llenaba la boca declarando a la provincia como pulmón de la madre tierra y fuente de agua y vida. Sin embargo, ahora por intereses políticos se encuentra apoyando una minería ilegal altamente contaminante”, aseguró Viteri.
Los enfrentamientos se produjeron en el puente sobre el río Nangaritza, poco antes de llegar a Paquisha.
Con palos, piedras y bombas molotov; los manifestantes atacaron a miembros de la Policía Nacional, quienes respondieron con gas lacrimógeno.
Según Quishpe, durante los actos de violencia cuatro personas resultaron con heridas de diversa magnitud.