Ecuador anunció hoy que se defenderá con "entereza y solidez jurídica" de la demanda que presentó la petrolera estadounidense Chevron-Texaco al Gobierno de Ecuador ante la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya por supuestas violaciones al Tratado Bilateral de Inversiones entre ambos países.
El Procurador General del Estado, Diego García, declaró que "Chevron desde hace algunos años ha venido demostrando su intención de iniciar el presente arbitraje, con la diferencia que sería luego de la existencia de una decisión adversa a la compañía y una vez que se hubiera agotado la apelación".
"El Estado se defenderá con entereza y solidez jurídica. El reclamo ambiental debería ser resuelto por las cortes competentes y entre las partes, no en un arbitraje en el cual los particulares ni siquiera están representados", señala García en un comunicado emitido hoy por la Procuraduría.
El escrito, titulado "En relación a las acusaciones de Chevron de una supuesta conducta inapropiada y propuestas de soborno en el litigio ambiental en Lago Agrio", confirma que la Procuraduría recibió ayer una notificación de arbitraje presentada por la Compañía Chevron Corporation y Texaco Petroleum Company (Chevron).
"Chevron pretende lograr a través de un arbitraje lo que no pudo lograr ni en las cortes ecuatorianas ni en las cortes de EEUU, es decir, una decisión en la que Chevron no pueda ser condenada en una sentencia que podría ser dictada en su contra en el juicio que está aún pendiente por resolverse en la Corte de Lagro Agrio", indica.
En principio, el fallo en este caso estaba previsto para finales de este año o comienzos de 2010.
El comunicado añade que luego de 16 años de litigio por daños ambientales entre Chevron y un grupo de ciudadanos ecuatorianos -comunidades indígenas- que se alega fue causado por la predecesora de Chevron, esta compañía busca ahora que en un nuevo foro se decida este caso.
Ello, señala, "sin importar que fuera Chevron en su momento la que peleó desde el año 1993 hasta el año 2003 en una corte en los Estados Unidos, finalmente con éxito, para que se transfiriera el reclamo ambiental a una corte de Lago Agrio", en la Amazonía ecuatoriana.
Chevron informó ayer en un comunicado que "ha presentado una demanda de arbitraje internacional contra el Gobierno de Ecuador, citando violaciones a las obligaciones del país, bajo el Tratado Bilateral de Inversiones" y el derecho internacional.
Según la petrolera, el Gobierno de Quito se ha aprovechado del juicio que habitantes de la Amazonía ecuatoriana mantienen contra Chevron por supuestos daños ambientales y que exigen una indemnización de $27 000 millones.
Además, sostiene que el Ejecutivo ecuatoriano no ha cumplido con sus obligaciones contraídas hace una década, cuando admitió que en el futuro no ejercería reclamo alguno contra la compañía, al dar por aceptado un acuerdo de reparación ambiental presentado por la petrolera estadounidense.
Chevron afronta una demanda por daño ambiental en la Corte de la provincia amazónica de Sucumbíos, donde la petrolera Texaco, comprada por Chevron en 2000, operó entre 1972 y 1992.
La acción de la petrolera se dio pocas semanas después de que presentara un vídeo, obtenido de forma subrepticia, en el que involucra al juez ecuatoriano Juan Núñez, que seguía el caso por daño ambiental en Sucumbíos, de estar envuelto en una supuesta trama de soborno en perjuicio de Chevron.
Además, la compañía estadounidense ha acusado al Gobierno de Quito de injerencia en el juicio y de apoyar, abiertamente, a los miles de colonos e indígenas de la Amazonía, que acusan a Chevron por el daño ecológico y social causado en esa región. (EFE)
El Procurador General del Estado, Diego García, declaró que "Chevron desde hace algunos años ha venido demostrando su intención de iniciar el presente arbitraje, con la diferencia que sería luego de la existencia de una decisión adversa a la compañía y una vez que se hubiera agotado la apelación".
"El Estado se defenderá con entereza y solidez jurídica. El reclamo ambiental debería ser resuelto por las cortes competentes y entre las partes, no en un arbitraje en el cual los particulares ni siquiera están representados", señala García en un comunicado emitido hoy por la Procuraduría.
El escrito, titulado "En relación a las acusaciones de Chevron de una supuesta conducta inapropiada y propuestas de soborno en el litigio ambiental en Lago Agrio", confirma que la Procuraduría recibió ayer una notificación de arbitraje presentada por la Compañía Chevron Corporation y Texaco Petroleum Company (Chevron).
"Chevron pretende lograr a través de un arbitraje lo que no pudo lograr ni en las cortes ecuatorianas ni en las cortes de EEUU, es decir, una decisión en la que Chevron no pueda ser condenada en una sentencia que podría ser dictada en su contra en el juicio que está aún pendiente por resolverse en la Corte de Lagro Agrio", indica.
En principio, el fallo en este caso estaba previsto para finales de este año o comienzos de 2010.
El comunicado añade que luego de 16 años de litigio por daños ambientales entre Chevron y un grupo de ciudadanos ecuatorianos -comunidades indígenas- que se alega fue causado por la predecesora de Chevron, esta compañía busca ahora que en un nuevo foro se decida este caso.
Ello, señala, "sin importar que fuera Chevron en su momento la que peleó desde el año 1993 hasta el año 2003 en una corte en los Estados Unidos, finalmente con éxito, para que se transfiriera el reclamo ambiental a una corte de Lago Agrio", en la Amazonía ecuatoriana.
Chevron informó ayer en un comunicado que "ha presentado una demanda de arbitraje internacional contra el Gobierno de Ecuador, citando violaciones a las obligaciones del país, bajo el Tratado Bilateral de Inversiones" y el derecho internacional.
Según la petrolera, el Gobierno de Quito se ha aprovechado del juicio que habitantes de la Amazonía ecuatoriana mantienen contra Chevron por supuestos daños ambientales y que exigen una indemnización de $27 000 millones.
Además, sostiene que el Ejecutivo ecuatoriano no ha cumplido con sus obligaciones contraídas hace una década, cuando admitió que en el futuro no ejercería reclamo alguno contra la compañía, al dar por aceptado un acuerdo de reparación ambiental presentado por la petrolera estadounidense.
Chevron afronta una demanda por daño ambiental en la Corte de la provincia amazónica de Sucumbíos, donde la petrolera Texaco, comprada por Chevron en 2000, operó entre 1972 y 1992.
La acción de la petrolera se dio pocas semanas después de que presentara un vídeo, obtenido de forma subrepticia, en el que involucra al juez ecuatoriano Juan Núñez, que seguía el caso por daño ambiental en Sucumbíos, de estar envuelto en una supuesta trama de soborno en perjuicio de Chevron.
Además, la compañía estadounidense ha acusado al Gobierno de Quito de injerencia en el juicio y de apoyar, abiertamente, a los miles de colonos e indígenas de la Amazonía, que acusan a Chevron por el daño ecológico y social causado en esa región. (EFE)