Ecuador suscribió ayer en Quito la carta de intención con la empresa china Sinohydro, que financiará el 85% de los 2.000 millones, que cuesta la central hidroeléctrica Coca-Codo-Sinclair a construirse en la Amazonia.
"Este documento es un acuerdo para avanzar en las negociaciones, que desembocarán en la firma del contrato de construcción\", prevista para el 20 de junio próximo, indicó el subsecretario de Sectores Estratégicos, Germánico Pinto.
Agregó que "hay un avance significativo en el proyecto energético más importante en Ecuador\", que tiene capacidad de generar 1.500 megavatios es decir el 50% más de lo que actualmente produce la central Paute.
El funcionario precisó que la adjudicación de la obra se oficializará con la firma del contrato, y que hasta entonces equipos técnicos, económicos y jurídicos de las dos partes, trabajarán en forma conjunta para establecer el marco que permita avanzar en las negociaciones.
Sinohydro es la única empresa que continúa en la licitación, luego que el comité de contratación resolvió en marzo no calificar, la oferta técnica de la también china Gezhouba, debido al incumplimiento de requerimientos precontractuales.
Ecuador es deficitario en la generación de energía hidroeléctrica, por lo cual debe comprar a Colombia aunque el volumen ha ido disminuyendo paulatinamente, ubicándose en 33 megavatios de los 200 que eran inicialmente.
Con la nueva generadora y aquellas más pequeñas que proyecta el gobierno construir, como Mazar y Sopladora, podrá llegar a los 2.800 megavatios que son las exigencias actuales.
Ecuador depende casi en el 40% de la generación térmica, especialmente durante la temporada de estiaje en las fuentes hídricas de la Sierra centro y sur. Su producción es cuatro veces más cara que la energía de origen hídrico, debido a que debe importarse el combustible.
"Este documento es un acuerdo para avanzar en las negociaciones, que desembocarán en la firma del contrato de construcción\", prevista para el 20 de junio próximo, indicó el subsecretario de Sectores Estratégicos, Germánico Pinto.
Agregó que "hay un avance significativo en el proyecto energético más importante en Ecuador\", que tiene capacidad de generar 1.500 megavatios es decir el 50% más de lo que actualmente produce la central Paute.
El funcionario precisó que la adjudicación de la obra se oficializará con la firma del contrato, y que hasta entonces equipos técnicos, económicos y jurídicos de las dos partes, trabajarán en forma conjunta para establecer el marco que permita avanzar en las negociaciones.
Sinohydro es la única empresa que continúa en la licitación, luego que el comité de contratación resolvió en marzo no calificar, la oferta técnica de la también china Gezhouba, debido al incumplimiento de requerimientos precontractuales.
Ecuador es deficitario en la generación de energía hidroeléctrica, por lo cual debe comprar a Colombia aunque el volumen ha ido disminuyendo paulatinamente, ubicándose en 33 megavatios de los 200 que eran inicialmente.
Con la nueva generadora y aquellas más pequeñas que proyecta el gobierno construir, como Mazar y Sopladora, podrá llegar a los 2.800 megavatios que son las exigencias actuales.
Ecuador depende casi en el 40% de la generación térmica, especialmente durante la temporada de estiaje en las fuentes hídricas de la Sierra centro y sur. Su producción es cuatro veces más cara que la energía de origen hídrico, debido a que debe importarse el combustible.
