De las 4.000 estaciones de servicio en los hipermercados, que distribuyen el 60% del carburante en Francia, hay unas 1.500 sin combustible, declaró Alexandre de Benoist, delegado general de la Unión de Importadores Independientes Petroleros (UIP).
Las protestas contra la reforma de la jubilación, que aumentará de 60 a 62 años la edad mínima legal para jubilarse y de 65 a 67 años la edad para cobrar una pensión completa, que arrancaron a principios de septiembre, alcanzaron en la última semana al sector petrolero.
El saldo de este reclamo es que las 12 refinerías de Francia, que abastecen los 220 depósitos de combustible y las 12.500 gasolineras de todo el país, están en huelga.
Los reclamos transcurrieron ayer con el bloqueo de terminales de transportes urbanos de pasajeros y nuevos depósitos de combustible, mientras que la circulación ferroviaria seguía perturbada. Se sumaron a las protestas los estudiantes, en las que se produjeron actos de violencia protagonizados por jóvenes ajenos a las escuelas en los suburbios de París, Nantes (oeste), Lille y Rouen (norte) y Lyon (centro-este) que se saldaron con 196 detenidos, según la Policía.
Según el Ministerio de Educación, más de 260 escuelas secundarias -es decir el 6% de los 4.302 de Francia- se movilizaron ayer en vísperas de la nueva jornada nacional de huelgas y protestas convocadas por los sindicatos, mientras que la Unión Nacional de Liceos (UNL) cifró, en cambio, en 650 los colegios que participaban en las protestas, de los cuales 400 estaban bloqueados, es decir que se impide acceder a ellos.
Así, las dos más importantes organizaciones de estudiantes secundarios y universitarios llamaron a participar en la jornada nacional de huelgas y protestas convocada por los sindicatos para hoy, que apoyan el 71% de los franceses según una encuesta del instituto CSA.
La Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) prevé también para hoy la anulación del 50% de los vuelos en el aeropuerto parisino de Orly y el 30% en el resto de los aeropuertos, entre ellos el Roissy-Charles de Gaulle.
Mientras tanto, el Gobierno insiste en que no hay desabastecimiento de combustible, pero ayer al término de una reunión presidida por Nicolas Sarkozy, se anunció la creación de una “célula interministerial de crisis” para garantizar el abastecimiento de combustible.
El Presidente francés desafió ayer a los huelguistas y resaltó que aplicará su reforma de las pensiones, pese a la oposición que genera, y justificó la intervención del Gobierno para garantizar el abastecimiento de carburante y evitar enfrentamientos.
“Esta reforma es esencial. Francia se ha comprometido a llevarla a cabo”, subrayó Sarkozy al término de un encuentro con la canciller alemana, Angela Merkel, en Deauville, antes de que se les sumara el presidente ruso, Dmitri Medvédev.