La Acnur, la Agencia Hebrea de Ayuda a Inmigrantes, el Servicio Jesuita a Refugiados Migrantes apoyan por tratarse de personas que requieren protección internacional
Muchos colombianos que han huido del conflicto interno de su país se han refugiado en Ecuador y han instalado negocios.
Del departamento de Nariño (frontera con Ecuador), donde se encuentran los principales grupos armados activos, proviene la mayoría de desplazados.
Hacia el este, el departamento de Putumayo también sufre inestabilidad y violencia. Martha Restrepo, refugiada desde hace año y medio en San Lorenzo del Pailón, norte de Esmeraldas, dice que el principal problema es su condición migratoria irregular.
En cambio Olga, refugiada desde abril de 2009 ya tiene el registro ampliado y ahora trabaja legalmente en su local de empanadas y morocho que instaló en Muisne, al sur de la provincia.
La Cancillería y el Alto Comisionado para Refugiados (Acnur) aspiraban regularizar el año pasado a 50 mil colombianos en Esmeraldas, Imbabura, Carchi, Sucumbíos y Orellana.
El Acnur estima que en Ecuador alrededor de 135 mil personas (98% de nacionalidad colombiana) necesitarían protección. Cerca de 52 mil ya han recibido el status de refugiado que otorga el Estado ecuatoriano; mientras en Esmeraldas unas 10 mil personas aún no la tienen.
El registro aún continúa atendiendo a los desplazados en la oficina de la Policía de Migración, en el Comando CP-14. Principalmente se atiende a gente de los departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca, dijo María Valles, encargada de la oficina.
Pero el incremento de desplazados ha generado más demanda de empleo y quienes tienen dinero instalaron sus propios negocios. Uno de ellos es Mario N., quien instaló un local de ropa y zapatos en Atacames.
Para los desempleados, la Agencia Hebrea de Ayuda a Inmigrantes (HIAS) y el Acnur, entregan microcréditos para pequeños proyectos. Unas 120 familias entre desplazados y población esmeraldeña se atendieron con el Servicio de Orientación Laboral, reveló Jacqueline Bue no, coordinadora de este programa.
De su lado, el Acnur ha creado microempresas para los colombianos residentes en San Lorenzo del Pailón. Valles sostuvo que este organismo ayuda a la provincia "Verde" por ser receptora de desplazados que requieren protección internacional.
A esta ayuda se unió el Servicio Jesuita a Refugiados y Migrantes–Ecuador. Estos tres organismos cubren en parte las deficiencias en el ámbito de la protección y de necesidades básicas.
En alojamiento, la seguridad alimentaria, la salubridad y las medidas para prevenir la violencia sexual, que son los problemas identificados en la zona fronteriza binacional. En las tres provincias fronterizas (Carchi, Sucumbíos y Esmeraldas), el Estado invierte en este año $344 752 830, en ejecución de obras.
Con la Senplades y el Plan Ecuador se ha establecido coordinación con 17 ministerios a nivel central y se ha conformado un comité de gestión de la inversión en la Frontera Norte.
Muchos colombianos que han huido del conflicto interno de su país se han refugiado en Ecuador y han instalado negocios.
Del departamento de Nariño (frontera con Ecuador), donde se encuentran los principales grupos armados activos, proviene la mayoría de desplazados.
Hacia el este, el departamento de Putumayo también sufre inestabilidad y violencia. Martha Restrepo, refugiada desde hace año y medio en San Lorenzo del Pailón, norte de Esmeraldas, dice que el principal problema es su condición migratoria irregular.
En cambio Olga, refugiada desde abril de 2009 ya tiene el registro ampliado y ahora trabaja legalmente en su local de empanadas y morocho que instaló en Muisne, al sur de la provincia.
La Cancillería y el Alto Comisionado para Refugiados (Acnur) aspiraban regularizar el año pasado a 50 mil colombianos en Esmeraldas, Imbabura, Carchi, Sucumbíos y Orellana.
El Acnur estima que en Ecuador alrededor de 135 mil personas (98% de nacionalidad colombiana) necesitarían protección. Cerca de 52 mil ya han recibido el status de refugiado que otorga el Estado ecuatoriano; mientras en Esmeraldas unas 10 mil personas aún no la tienen.
El registro aún continúa atendiendo a los desplazados en la oficina de la Policía de Migración, en el Comando CP-14. Principalmente se atiende a gente de los departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca, dijo María Valles, encargada de la oficina.
Pero el incremento de desplazados ha generado más demanda de empleo y quienes tienen dinero instalaron sus propios negocios. Uno de ellos es Mario N., quien instaló un local de ropa y zapatos en Atacames.
Para los desempleados, la Agencia Hebrea de Ayuda a Inmigrantes (HIAS) y el Acnur, entregan microcréditos para pequeños proyectos. Unas 120 familias entre desplazados y población esmeraldeña se atendieron con el Servicio de Orientación Laboral, reveló Jacqueline Bue no, coordinadora de este programa.
De su lado, el Acnur ha creado microempresas para los colombianos residentes en San Lorenzo del Pailón. Valles sostuvo que este organismo ayuda a la provincia "Verde" por ser receptora de desplazados que requieren protección internacional.
A esta ayuda se unió el Servicio Jesuita a Refugiados y Migrantes–Ecuador. Estos tres organismos cubren en parte las deficiencias en el ámbito de la protección y de necesidades básicas.
En alojamiento, la seguridad alimentaria, la salubridad y las medidas para prevenir la violencia sexual, que son los problemas identificados en la zona fronteriza binacional. En las tres provincias fronterizas (Carchi, Sucumbíos y Esmeraldas), el Estado invierte en este año $344 752 830, en ejecución de obras.
Con la Senplades y el Plan Ecuador se ha establecido coordinación con 17 ministerios a nivel central y se ha conformado un comité de gestión de la inversión en la Frontera Norte.
