
El martes, el presidente Rafael Correa dijo que uno de ellos es el cabecilla de la revuelta del 30 de septiembre. Incluso indicó que los pasquines que circularon ese día salieron de la Cárcel 4.
Los agentes del ex GAO denunciaron a Chávez que a la 01:00 del viernes 8, la Policía ingresó a las celdas y se llevó las computadoras, aunque no se sabe cuántas.
La versión fue ratificada por el director de esta prisión, Jorge Noguera, quien indicó que no sabe sobre los e-mails referidos por Correa. Un familiar que ayer esperaba la visita, cuestionó al Jefe de Estado y dijo que los policías que operaban en el GAO no tienen portátiles. Pero Noguera reconoció que sí cuentan con esa herramienta, pero no con Internet. “La conexión solamente existe en las oficinas administrativas”.
Los agentes esperan el juicio. Ese jueves 30 debía concretarse la audiencia de juzgamiento en contra del grupo. Pero la diligencia se suspendió por la revuelta que comenzó pasadas las 07:00 en el Regimiento Quito 1.
La molestia en contra de la cúpula policial y del Jefe de Estado se hizo más visible tras la detención de los ex GAO. Ese día, sus familiares protestaron con carteles en donde se leían mensajes como “Los policías son sus compañeros comandante general” o “ Estamos desprotegidos, señor Presidente”.
Esta versión se repitió ayer en la Cárcel 4. La esposa de un agente del ex GAO indicó que nunca encontraron respaldo del comando.
Esta unidad de la Policía se desarticuló justamente en este Gobierno y porque sus hombres estaban involucrados en posibles violaciones a los DD.HH. En marzo, el ministro del Interior, Gustavo Jalkh, pidió a la Fiscalía que se investigara la desaparición del ciudadano Hernán Cedeño presuntamente en manos del GAO.
Cuatro meses después, el Gobierno dispuso la reapertura de todos los expedientes administrativos disciplinarios de la Policía, que tengan relación con casos de violación a derechos humanos.
En septiembre, Jalkh firmó un acuerdo para la aplicación de un nuevo manual de procedimientos ante las detenciones. Allí se dijo, por ejemplo, que los detenidos no pueden ser trasladados en los baldes de las camionetas.
“Estas cosas son las que minaron la confianza de las autoridades y molestaron a nuestros familiares”, dijo ayer la esposa de un ex agente del GAO detenido.
El hacinamiento de la Cárcel 4 fue otro aspecto que detectó Chávez. Hay espacio solo para 40 internos, pero hay 59. Según Noguera, ante el exceso de internos se readecuó el taller de carpintería y se improvisaron habitaciones para seis uniformados. En asesoría jurídica se instaló el dormitorio para el guardia. Al saber de esta situación, los familiares de los reclusos arrestados por la revuelta pidieron la “libertad inmediata”. “Ellos no han hecho nada para que los tengan embodegados”, indicó el hermano de un policía.
Fiscalía citó a Patiño y Jalkh
Irina Cabezas, asambleísta de A. País, compareció ayer ante la Fiscalía para dar su versión sobre lo ocurrido durante la revuelta policial del 30 de septiembre.
A las 17:25, la Vicepresidenta de la Asamblea arribó acompañada por sus abogados y asesores. Y hasta el cierre de esta edición continuaba su comparecencia.
Ella, junto con los asambleístas Gabriel Rivera y César Rodríguez, fue citada a comparecer en forma voluntaria. Rodríguez se excusó de hacerlo a través de un comunicado en el que indicó que se encontraba participando en un foro de socialización del proyecto de Ley de Educación.
Ayer en la mañana también acudieron los tres oficiales de Policía inculpados por presunto delito de tentativa de asesinato contra el presidente Rafael Correa.
Los coroneles Edwin Echeverría, Julio César Cueva y José Rivadeneira asistieron para ampliar sus declaraciones como parte de la instrucción del caso.
Por disposición del juez XXI, Santiago Coba, los tres uniformados están impedidos de abandonar el país y de presentarse ante el juez cada 15 días.
Dentro del mismo proceso, hoy, desde las 09:00, deben comparecer los ministros Richard Espinoza (Relaciones Laborales), Patricio Rivera (Finanzas), Gustavo Jalkh (Interior) y el de Relaciones Exteriores, Ricardo Patiño.