Los agricultores de Ecuador y Perú han esperado 39 años para que se finiquite el Proyecto Binacional Puyango-Tumbes, cuyo objetivo es utilizar el recurso hídrico superficial en el riego agrícola mediante el trasvase de las aguas del río Puyango (ecuatoriano) y Tumbes (peruano).
Las aguas serán utilizadas para regadío en Ecuador y Perú, en una zona que comprende 44.600 hectáreas de frontera agrícola: 29.300 corresponden al país y 15.300 al vecino del sur.
“En el transcurso de los años, los diferentes gobiernos habían prometido concluir el proyecto, pero nada. Todo ese tiempo hemos acarreado con problemas del agua. Nuestra tierra es muy productiva, pero la falta del líquido no nos permitía salir adelante”, indicó Rosa Silveiro, agricultora del cantón Arenillas.
Silveiro confía en que el nuevo Gobierno hará realidad el sueño de miles de orenses.
Agrega que por muchos años vivieron ilusionados con el proyecto, pero que ya habían perdido las esperanzas de verlo realizado. Justo ahí es que a través de los medios de comunicación se enteraron de que habían firmado el convenio de factibilidad del proyecto.
“Estábamos decepcionados, ya habíamos tirado la toalla, ya no creíamos en ningún gobierno. Hoy confiamos ciegamente en que el actual Mandatario cumplirá su promesa y nos dará el sistema de riego”, indicó.
La felicidad de Silveiro es compartida por Pedro Oyola, presidente de los agricultores de la parroquia Chacras, quien tiene 20 hectáreas de cacao y limón. Indicó que riega sus cultivos con un sistema de bombeo que extrae el agua del río Tumbes.
“El actual sistema de bombeo nos reduce las ganancias, no podemos salir adelante de esta manera. El proyecto Puyango-Tumbes nos ahorrará dinero y con ello vamos a salir de la pobreza”, manifestó.
Carlos García, agricultor de Tumbes, resaltó cómo ha avanzado el proyecto por parte de ambos gobiernos y celebró que “por fin se concrete esta iniciativa que por cerca de 40 años les ha sido prometida”.
“Somos países hermanos que nos vamos a desarrollar con estos ambiciosos proyectos. La guerra ya se terminó hace tiempo, gracias a Dios, ahora nos toca a todos unir fuerzas y salir adelante”, dijo García.
En el proyecto, que surgió con los acuerdos de paz entre ambos países en 1998, se invertirán US$ 298,5 millones.
Las obras consisten en una represa derivadora en Linda Chara y el trasvase, por donde son desviadas las aguas del río Puyango-Tumbes hacia el río Zarumilla, donde se construirá la presa de regulación Palmales.
En Ecuador, las zonas que se beneficiarán son las que están ubicadas en la parte baja de la provincia de El Oro, como los cantones Santa Rosa, Arenillas, Huaquillas y Las Lajas. En cambio, en Perú regará hasta las márgenes del río que lleva su mismo nombre, en la región Tumbes.
El río Puyango nace en Ecuador, en la región montañosa suroriental, y la cuenca hidrográfica está integrada por una serie de afluentes que recorren la parte alta y baja de El Oro, en la frontera con Perú.
Para el ministro de Agricultura ecuatoriano, Ramón Espinel, con la firma del “Convenio Específico para la Elaboración de Estudios de Factibilidad, Diseño Definitivo, Ejecución de las Obras Comunes y Supervisión y Fiscalización del Proyecto Binacional Puyango - Tumbes” se concreta el sueño de los dos países, que nació en la década del 70.
Las aguas serán utilizadas para regadío en Ecuador y Perú, en una zona que comprende 44.600 hectáreas de frontera agrícola: 29.300 corresponden al país y 15.300 al vecino del sur.
“En el transcurso de los años, los diferentes gobiernos habían prometido concluir el proyecto, pero nada. Todo ese tiempo hemos acarreado con problemas del agua. Nuestra tierra es muy productiva, pero la falta del líquido no nos permitía salir adelante”, indicó Rosa Silveiro, agricultora del cantón Arenillas.
Silveiro confía en que el nuevo Gobierno hará realidad el sueño de miles de orenses.
Agrega que por muchos años vivieron ilusionados con el proyecto, pero que ya habían perdido las esperanzas de verlo realizado. Justo ahí es que a través de los medios de comunicación se enteraron de que habían firmado el convenio de factibilidad del proyecto.
“Estábamos decepcionados, ya habíamos tirado la toalla, ya no creíamos en ningún gobierno. Hoy confiamos ciegamente en que el actual Mandatario cumplirá su promesa y nos dará el sistema de riego”, indicó.
La felicidad de Silveiro es compartida por Pedro Oyola, presidente de los agricultores de la parroquia Chacras, quien tiene 20 hectáreas de cacao y limón. Indicó que riega sus cultivos con un sistema de bombeo que extrae el agua del río Tumbes.
“El actual sistema de bombeo nos reduce las ganancias, no podemos salir adelante de esta manera. El proyecto Puyango-Tumbes nos ahorrará dinero y con ello vamos a salir de la pobreza”, manifestó.
Carlos García, agricultor de Tumbes, resaltó cómo ha avanzado el proyecto por parte de ambos gobiernos y celebró que “por fin se concrete esta iniciativa que por cerca de 40 años les ha sido prometida”.
“Somos países hermanos que nos vamos a desarrollar con estos ambiciosos proyectos. La guerra ya se terminó hace tiempo, gracias a Dios, ahora nos toca a todos unir fuerzas y salir adelante”, dijo García.
En el proyecto, que surgió con los acuerdos de paz entre ambos países en 1998, se invertirán US$ 298,5 millones.
Las obras consisten en una represa derivadora en Linda Chara y el trasvase, por donde son desviadas las aguas del río Puyango-Tumbes hacia el río Zarumilla, donde se construirá la presa de regulación Palmales.
En Ecuador, las zonas que se beneficiarán son las que están ubicadas en la parte baja de la provincia de El Oro, como los cantones Santa Rosa, Arenillas, Huaquillas y Las Lajas. En cambio, en Perú regará hasta las márgenes del río que lleva su mismo nombre, en la región Tumbes.
El río Puyango nace en Ecuador, en la región montañosa suroriental, y la cuenca hidrográfica está integrada por una serie de afluentes que recorren la parte alta y baja de El Oro, en la frontera con Perú.
Para el ministro de Agricultura ecuatoriano, Ramón Espinel, con la firma del “Convenio Específico para la Elaboración de Estudios de Factibilidad, Diseño Definitivo, Ejecución de las Obras Comunes y Supervisión y Fiscalización del Proyecto Binacional Puyango - Tumbes” se concreta el sueño de los dos países, que nació en la década del 70.