Auspiciada por Estados Unidos, en el Salón Benjamín Franklin del Departamento de Estado, su titular Hillary Clinton se encargó de inaugurar la primera conversación directa, en veinte meses entre Israel y Palestina, y agradeció a los líderes de ambos pueblos su “coraje y compromiso”.
Al hacer un balance del relanzamiento de las negociaciones, el negociador estadounidense, George Mitchell, informó que Netanyahu y Abbas acordaron continuar con las negociaciones los próximos 14 y 15 de septiembre, y cada quincena después, para lograr un acuerdo que “ponga fin al conflicto y establezca una paz duradera”.
Previamente, el primer ministro israelí le expresó ayer al presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) que estaba dispuesto a hacer concesiones si los palestinos también lo hacen para alcanzar la paz. “Una paz duradera, solo la conseguiremos con concesiones mutuas y dolorosas por ambas partes, por el lado israelí y por el lado palestino, por mi lado y por el suyo”, resaltó Netanyahu.
Agregó que está dispuesto a lograr “un compromiso histórico” para la paz en la negociación con el líder palestino, a quien calificó como “un socio para la paz”.
Al tomar la palabra, el presidente de Palestina, Mahmud Abbas, respondió: “La seguridad es vital tanto para nosotros como para ustedes y no aceptaremos que nadie cometa actos contra vuestra seguridad y la nuestra”.
También hizo un llamado a los israelíes para que terminen “toda actividad” en los asentamientos judíos, como requisito para lograr un acuerdo de paz en la región. “Una vez más, queremos declarar nuestro compromiso con la seguridad y poner fin a la incitación (a la violencia), pero instamos a los israelíes que cesen los asentamientos y levanten el embargo en Gaza”, expresó.
Los palestinos quieren erigir un Estado en Cisjordania y la Franja de Gaza, que actualmente está administrada por el movimiento islamista Hamás, con Jerusalén Este como capital. Israel reivindica a Jerusalén como su capital indivisible.
Mientras tanto, fuerzas de seguridad israelíes y palestinas buscaban ayer, en Cisjordania, a los responsables del segundo ataque reivindicado por Hamás contra colonos israelíes.